Mas propone un pacto fiscal con hacienda propia y límites a la solidaridad

Barcelona, 12 jul.- El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha presentado hoy al conjunto de fuerzas políticas catalanas su propuesta de bases del pacto fiscal, que prevé una agencia tributaria propia de Cataluña y una cuota de solidaridad con el Estado, aunque estableciendo ciertos límites al déficit fiscal catalán.

En la segunda cumbre catalana para hablar del pacto fiscal, celebrada esta mañana en el Palau de la Generalitat, Mas ha acudido con un documento de dos folios que debe servir de base negociadora de aquí al 25 de julio, cuando el pleno del Parlament apruebe la propuesta de pacto fiscal que el Govern deberá negociar en Madrid.

Al salir de la reunión, que ha durado poco más de dos horas, el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, ha afirmado que, tras los recortes anunciados por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se pone aún más de relieve la "necesidad" de que Cataluña se dote de un pacto fiscal.

CiU ha valorado "positivamente" los contenidos del documento de Mas, con el que no se busca la adhesión de nadie, sino que el Govern está abierto a escuchar las enmiendas que presente cada grupo.

Con este documento, Mas toma la iniciativa de las negociaciones, con ánimo de que el acuerdo gire en torno a su propuesta fiscal y que incluya el apoyo no solo de CiU, ICV-EUiA y ERC, sino también del PSC, aunque sin renunciar a aspectos esenciales del modelo.

Duran ha garantizado que la intención de CiU es atraer al consenso a los socialistas: "Seguiremos haciendo todo lo posible hasta el 25 de julio".

El borrador presentado por Mas, que consta de cinco puntos, se inicia con un reconocimiento a las conclusiones del pacto fiscal aprobadas en comisión parlamentaria en 2011 por CiU, ICV-EUiA y ERC.

En base a estas conclusiones, se emplaza al Govern a negociar un modelo que prevea que "la gestión, la recaudación, la liquidación y la inspección de todos los tributos estatales soportados en Cataluña" correspondan a la Agencia Tributaria catalana.

Esta hacienda catalana debería "disponer de plena capacidad y atribuciones para la organización y el ejercicio de las funciones propias de la gestión tributaria", si bien podría "colaborar y suscribir convenios" con la Agencia Tributaria estatal.

Mas mantiene así su apuesta por una hacienda propia, con una ligera aproximación al PSC, que defiende un consorcio con el Estado.

La Generalitat dispondría, según propone Mas, de "capacidad normativa y responsabilidad fiscal sobre todos y cada uno de los impuestos estatales soportados en Cataluña".

Otro aspecto clave se refiere a la "cuota de retorno" para pagar al Estado los servicios que presta en Cataluña, así como en concepto de solidaridad interterritorial, una cuota que sería revisable cada cinco años y acordada bilateralmente por ambas partes, si bien se establecerían ciertos límites a esa aportación solidaria.

El documento no fija un tope concreto, pero CiU viene defendiendo que el déficit fiscal no debería superar el 4% del PIB de Cataluña.