Los mejores créditos y ayudas para financiar la compra de un coche eléctrico

Los coches eléctricos continúan haciéndose hueco en el mercado automovilístico español, aumentado su cuota año tras año. Sin embargo, la movilidad verde se queda todavía lejos de superar en ventas a los motores de combustión, y tanto los gobiernos como los bancos intentan apostar por la sostenibilidad facilitando la financiación de este tipo de vehículos.

A pesar de las ventajas económicas que puede suponer la compra de un coche eléctrico, cuyo repostaje permite un gran ahorro en comparación con el diésel o la gasolina, factores como la falta de infraestructura o el elevado precio de este tipo de modelos hacen que para muchos españoles la transición a la movilidad sostenible no resulte una opción atractiva.

Por eso, muchas entidades bancarias ofrecen soluciones de financiación con condiciones mejoradas para la compra de un coche eléctrico o híbrido, como intereses más bajos o menos comisiones. En un momento en el que la escalada del euríbor ha encarecido la mayoría de créditos, algunas de estas opciones de préstamos ECO específicos para vehículos electrificados presentan rentabilidades muy competitivas.

Mejores préstamos ECO para coches

Según el comparador HelpMyCash, el crédito para al compra de un coche eléctrico con el tipo de interés más bajo del mercado es el Préstamo Coche Ecológico de BBVA, que aplica un TIN de entre el  4,80% al 5,80% (una TAE de entre el 5,08% y el 6,13%). Con esta opción se pueden financiar hasta 75.000 euros a devolver en un máximo de ocho años, y el proceso de solicitud se puede hacer totalmente online.

Kutxabank ofrece un Préstamo Verde para la compra de un coche eléctrico u otros proyectos relacionados con la sostenibilidad, con un tipo de interés nominal que parte del 5%. El plazo de amortización es de un máximo de siete años, y el importe máximo del crédito son 75.000 euros, aunque se recorta a 60.000 euros si se contrata online. A diferencia de BBVA, el banco con sede en Bilbao cobra una comisión de apertura del 1,5%.

El Banco Santander permite financiar un importe más alto, de hasta 80.000 euros, en un plazo de siete años con su Préstamo Coche Ecológico. Se puede contratar con un tipo de interés tan bajo como el 5,75%, siempre que la nomina del cliente se domicilie en el propio banco. Dependiendo del plazo y las vinculaciones con las que se firme el crédito, la TAE oscila entre el 6,38% y el 7,15%.

Para aquellos que prefieran un préstamos sin vinculaciones, Cetelem ofrece el Préstamo EcoAuto con un TIN desde el 5,99% hasta el 7,99%. El plazo para reembolsar el dinero prestado es de cinco años para importes inferiores a 10.000, pero asciende hasta los ocho años si se financian entre 10.000 y 60.000 euros.

Ayudas públicas para al comprar un coche eléctrico

Desde el Gobierno se ha creado también un programa para incentivar la electrificación de la movilidad, conocido como el Plan MOVES III. El programa se basa en la concesión de ayudas directas a las comunidades autónomas para que se destinen a promover la movilidad sostenible y cuenta con un presupuesto que se ha ampliado hasta los 1.200 millones de euros por la alta demanda.

Además de beneficiarse de la creación de nuevas infraestructuras para coches eléctricos financiadas por este programa, los usuario que compren un vehículo enchufable nuevo o seminuevo pueden recibir ayudas si lo solicitan antes del final del plazo el 31 de diciembre de 2023.

En concreto, por la compra de un turismo eléctrico con autonomía superior a los 90km y un precio inferior a 45.000 euros (o 53.000 si se trata de un vehículo de 8 o 9 plazas) la comunidad autónoma correspondiente proporcionará una ayuda al comprador de hasta 4.500 euros o 7.000 euros si se achatarra el vehículo anterior. Si se compra una furgoneta eléctrica en cambio, el importe podría ascender hasta los 9.000 euros con achatarramiento o 7.000 euros sin él.

Además, el Plan MOVES III contempla una ayuda de un 10% adicional al importe concedido en caso de tratarse de un autónomo del sector del taxi o VTC, una persona con discapacidad o residente en un municipio con menos de 5.000 habitantes en los que el acceso a infraestructuras para vehículos eléctricos sea más complicado.