Repsol sufre la mayor caída del IBEX tras la venta de acciones de Pemex

Madrid, 4 jun.- Las acciones de Repsol han registrado hoy el mayor retroceso del IBEX con una caída del 3,62 %, hasta los 20,11 euros por título, después de que su hasta ahora tercer accionista, Pemex, haya vendido casi toda su participación por "diferencias" con la dirección.

Pese a este descenso, las acciones de Repsol acumulan una revalorización del 9,77 % desde principios de año ya que el pasado lunes cerraron al precio más alto desde julio de 2007.

La desinversión ha afectado también a los dos principales accionistas de la petrolera: CaixaBank, que se ha dejado un 0,46 % hasta los 4,5 euros, y Sacyr, cuyos títulos han perdido un 0,79 % de su valor hasta terminar la sesión en 5 euros.

Pemex ha cerrado hoy la venta de un 7,86 % de Repsol por 2.091 millones de euros, con lo que su histórica participación en la petrolera española queda reducida a un 1,4 %.

La colocación entre inversores cualificados se ha cerrado a 20,1 euros por título y apenas dos días antes de que Repsol distribuya un dividendo extraordinario de un euro por acción.

El director general de Pemex, Emilio Lozoya, ha justificado hoy la desinversión por la "baja rentabilidad" de las acciones del grupo español y el hecho de que no se materializaran los "beneficios mutuos" firmados entre las dos empresas hace dos años.

Las desavenencias entre Pemex y la dirección de Repsol se remontan a 2011, cuando la empresa mexicana se alió con Sacyr, entonces presidida por Luis del Rivero, para sindicar sus acciones e intentar hacerse con el control.

Posteriormente y tras el fracaso de la operación, que supuso la salida de Del Rivero de la constructora, las relaciones entre ambas compañías se normalizaron gracias a un acuerdo de estabilidad.

Sin embargo, el conflicto se reabrió cuando Pemex intentó intermediar entre Repsol y el gobierno argentino para alcanzar un acuerdo de compensación por la expropiación de la petrolera YPF, una oferta que fue rechazada por la empresa española al considerarla insuficiente.

Posteriormente, en noviembre del pasado año la dirección de Pemex comenzó a criticar públicamente a la dirección de Repsol al considerar que los resultados económicos de su inversión en la empresa española no cumplían con sus expectativas.

Pemex llegó a negar su apoyo al equipo del presidente, Antonio Brufau, en un Consejo de Administración y en la última Junta General de Accionistas de Repsol, celebrada a finales de marzo, votó en contra del blindaje de la petrolera ante posibles segregaciones de sus negocios.