El ERTE de Ryanair, en el punto de mira: por qué el Supremo lo está investigando

En marzo de 2020, cuando estalló la pandemia de la Covid y España entera entró en cuarentena, una de las primeras medidas por la que optaron buena parte de las empresas, principalmente las que paralizaron su actividad (hostelería, aerolíneas...), fue llevar a cabo expedientes de regulación temporal de empleo entre sus plantillas. Ryanair fue una de las primeras, cuando el 13 de marzo de 2020 anunció un ERTE para su plantilla en España, además de otras medidas más controvertidas como instar a sus empleados a cogerse un permiso de vacaciones sin pagar. 

Un ERTE que esta misma semana estudiará el Tribunal Supremo (no será el único), tras haber sido declarado fraudulento por la Audiencia Nacional en octubre del año pasado. Entonces, se desestimó la demanda de impugnación interpuesta por la compañía irlandesa contra la resolución que revocaba el ERTE por fuerza mayor dictada por la Dirección General de Trabajo. 

"Obró de forma fraudulenta" 

La Sala de lo Social de la Audiencia Nacional desestimó que "Ryanair obró de forma fraudulenta para eludir el pago de unos salarios de tramitación a los que estaba condenada por sentencia", al anular el ERE aplicado por la aerolínea a los trabajadores de las bases de Tenerife, Lanzarote, Gran Canaria y Girona. El caso es que la sentencia del ERE de Ryanair declaraba nulo este despido colectivo y obligaba a la compañía a readmitir a los trabajadores de forma inmediata "en el trabajo efectivo de su empresa, en las mismas condiciones en que venían desempeñando sus servicios antes del despido colectivo y con abono inmediato de los salarios dejados de percibir desde la extinción del contrato".

Así, el pasado mes de mayo, tras conocer la nulidad del ERE aplicado, Ryanair presentó una solicitud para la autorización de incluir en el ERTE por fuerza mayor a un total de 206 trabajadores, de los que 12 de ellos no estaban incluidos en el ERE y tampoco en el ERTE solicitado anteriormente por Ryanair, con efectos desde el día 15 de marzo de 2020, dándose por aceptada la solicitud por silencio administrativo.

El sindicato USO señala que la compañía ocultó a los sindicatos la notificación expresa que realizó Trabajo en mayo y en la que confirmaba el silencio positivo. Por su parte, los sindicatos de tripulantes de cabina (TCP) en Ryanair, USO y Sitcpla, interpusieron recurso de alzada contra la aceptación de la Administración por silencio positivo, que fue estimada por el Ministerio de Trabajo el 10 de agosto. Al estimarse este recurso de alzada, Trabajo anulaba el ERTE de Ryanair para los despedidos readmitidos de Canarias y Girona por fraude, al considerar que la aerolínea pretendía que el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) abonara las prestaciones derivadas de la sentencia del ERE nulo. Con todo, a Audiencia Nacional terminó por confirmar la resolución de Trabajo y declarar la nulidad del ERTE que afectaba a los trabajadores afectados por el ERE en Canarias y Girona y a otros trabajadores que "olvidó" incluir en el ERTE anterior.