El contrato finaliza en 2023

El Mobile acelera para seguir hasta 2028 con Barcelona pese al órdago de Ayuso

Fotografía Mobile Congress para portada
Fotografía Mobile Congress para portada

Negociaciones en marcha para amarrar el Mobile World Congress (MWC) en Barcelona hasta 2028. John Hoffman, CEO de la Asociación Mundial de Operadores de Telefonía Móvil (GSMA), y Carlos Grau, director general de Mobile World Capital (MWC), mantienen ya conversaciones avanzadas de cara a la continuidad del evento mundial de móviles en la ciudad condal, según aseguran a La Información fuentes conocedoras. Todo ello pese a las vicisitudes que ha sufrido el congreso en los últimos años. Primero fue el referéndum independentista del 1 de octubre, luego vino el 155 y las elecciones del 21-D, después la sentencia del 'procés' y los disturbios violentos en las calles... y ahora la guinda la han puesto Ada Colau e Isabel Díaz Ayuso.

Las negociaciones, según fuentes cercanas a las mismas, caminan "en la buena dirección". Desde la organización del Mobile transmiten a las autoridades españoles (Mobile World Capital es una fundación participada por el Gobierno central, la Generalitat de Cataluña y el Ayuntamiento de Barcelona) su disposición inicial a continuar celebrando el evento en la Fira de Montjuïc. No quieren, eso sí, problemas que alteren la presencia de las decenas y decenas de directivos mundiales que acuden a la ciudad al evento.

Desde nuestro país, por su parte, se está transmitiendo al Mobile, siempre según las mismas fuentes, que los disturbios violentos en las calles son algo del pasado. Ayer mismo el expresidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, salió por primera vez de prisión. 'Tsunami Democràtic' ha cesado sus acciones en las calles. Y hay en marcha una mesa de negociación conjunta entre Gobierno central -ya constituido- y autonómico para intentar solucionar un "conflicto político". El evento tencológico, por tanto, no debería verse afectado por estas cuestiones. Lo que no se pueden evitar, aseguran, son huelgas de taxi, metro o autobuses. De hecho no se descartan paros en algunos transportes en la edición de este 2020.

Alguna fuente apunta incluso que la renovación del compromiso del Mobile por Barcelona durante cinco años más, hasta el 2028, podría anunciarse al término del congreso de este año que se celebrará entre el 24 y el 27 de febrero. Como en anteriores ediciones está prevista la presencia del Rey Felipe VI durante la inauguración del evento.

Las cifras detrás del MWC

El arraigo del evento con Barcelona es importante. Las dos principales administraciones tienen firmado desde el año 2011 un convenio de colaboración junto con el Estado para financiar buena parte de los costes de la organización. Tanto el Ayuntamiento como la Generalitat y el Ejecutivo central ponen sobre la mesa todos los años una partida de 5 millones de euros como subvención.

En el caso de la Administración Central del Estado, la responsabilidad es mayor, pues hace las veces de garante respecto a las otras dos. Es decir, debería responder con su dinero en caso de que las administraciones lideradas hoy por Quim Torra y Colau no paguen -aunque se reserva el derecho de reclamarlo posteriormente-, según el decreto ley aprobado por el Gobierno en junio de 2015. Tanto unos como otros han defendido en repetidas ocasiones la idoneidad de este desembolso, por la recaudación indirecta del impacto económico de 473 millones en la ciudad condal, según la cifra facilitada por la patronal Foment del Treball.

De esos 15 millones de euros públicos que se aportan a la Fundación Mobile World Capital, en 2019 -último presupuesto aprobado- se destinaron 9,5 millones a la comisión anual a la GSMA dentro del acuerdo para ser sede. Otros casi 600.000 euros para otras obligaciones contractuales de soporte del congreso y 30.000 en concepto de intereses por el aplazamiento del pago a la GSMA. Estas aportaciones públicas no son las únicas. Los patronos de la fundación y otros organizaciones empresariales también pasan por caja año tras año. En 2019 tenían previsto recibir más de 2 millones 'extra' de los miembros nuevos de la organización. Hay que tener en cuenta que más del 90% de todo el dinero que contempla como ingresos para hacer frente a los gastos del congreso proceden de subvenciones y donaciones.

Ayuso y Colau ponen palos en las ruedas

La pugna abierta por Isabel Díaz Ayuso para robar el Mobile a Barcelona ha encendido los ánimos entre empresarios catalanes, que no entienden la actitud de la presidenta madrileña. Fuentes del PP aseguran que el Gobierno autonómico ha establecido contactos al más alto nivel con los organizadores del congreso, ofreciendo al equipo de Hoffman estabilidad social y política ("en Madrid no hay piquetes separatistas", afirman), facilidades de movilidad, con Uber y Cabify sin restricciones, y "libertad" para desarrollar su proyecto. 

Sin embargo, fuentes conocedoras de las conversaciones restan importancia a las palabras de Ayuso (matizadas más tarde) y consideran que no tendrán influencia en las negociaciones abiertas con GSMA. Consideran que, en este momento, se está alejando el fantasma de una marcha del Mobile a ciudades que han estado al acedo, como Dubai, San Francisco y Lisboa.

Felipe VI
El Rey Felipe dio un discurso en el Mobile World Congress en perfecto catalán / EFE

Las negociaciones con GSMA para renovar el compromiso con la ciudad condal suelen iniciarse entre dos y tres años antes de la finalización del contrato. Es lo que ocurrió en 2015: el acuerdo concluía en 2018 pero el evento se amarró con mucha antelación. En este caso el pacto con la asociación finaliza en 2023, por lo que las conversaciones deberían cerrarse en los próximos meses, con suficiente tiempo de antelación para garantizar la ubicación de un congreso al que acuden cientos de directivos de todo el mundo y moviliza a miles de personas.

En el empresariado catalán tampoco ha gustado que el Ayuntamiento de Barcelona haya alojado en su página web un artículo titulado 'El 5G no es inocuo' en el que alertaba de los supuestos daños de esta tecnología en la salud. El consistorio dirigido por Ada Colau ya ha retirado este artículo. Pero llueve sobre mojado ya que hace apenas unos días el equipo municipal ya puso sobre la mesa la posibilidad de poner fin al Puente Aéreo, una vía directa de comunicación de la ciudad condal con Latinoamérica. Y es que, según denuncian los empresarios, la mayoría de los usuarios de este corredor no son finalistas.

Fuentes empresariales concluyen que amarrar el Mobile en Barcelona generaría seguridad para los próximos años. En primer lugar para los hosteleros, que hacen el 'agosto' durante esa semana. Y también se pondría fin al temor al posible 'efecto dominó' en otros congresos que provocaría el adiós del evento mundial de móviles. Estos empresarios esperan recibir pronto la buena noticia de la renovación.

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