La compañía española ferroviaria Renfe ofrecerá un total de 2,7 millones de plazas al año para el próximo año 2024 en sus viajes a Francia. Este es el dato que prevé Renfe cuando incorpore los trayectos Barcelona-París, y cuando comience a competir en el principal corredor de movilidad francés, que conecta París con Lyon y Marsella. Según han señalado fuentes de la compañía a la agencia Efe, ahora sus planes contemplan pasar de las actuales cuatro operaciones al día a un total de 16 AVE cada jornada.
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En un acto en el que Renfe fue reconocida como la compañía española del año por la Cámara de Comercio de España en Francia, su presidente, Raül Blanco, definió 2024 como el año del crecimiento exponencial en el mercado francés, ya que el AVE conectará 17 destinos a ambos lados de la frontera y dará servicio a un total de 20 estaciones.
Francia es el primer país en el que Renfe opera en solitario desde el verano pasado, cuando comenzó a ofrecer los enlaces Barcelona-Lyon y Madrid-Barcelona-Marsella Para los nuevos trayectos entre Barcelona y París, la compañía ferroviaria dispone de los 'surcos' (horarios de operación) a partir del 1 de septiembre -pendientes de que concluya el proceso de homologación de los AVE s-106 de Talgo- aunque pretende adelantarse y poder ofrecer este servicio para los Juegos Olímpicos de París, que dan comienzo el próximo 26 de julio.
Cumplir todos los requisitos
Estas fuentes han asegurado a Efe que si fuera posible cumplir en ese plazo con los requisitos para iniciar las operaciones, la española aprovechará los surcos que tenga disponibles la gestora de la infraestructura francesa, SNCF Réseau. Las nuevas operaciones de Renfe en Francia supondrán un aumento sustancial de la capacidad gracias a la entrada en servicio de los nuevos trenes AVE s-106, con más de 500 plazas por tren, con lo que la compañía calcula que podrá completar una oferta de 2,7 millones de plazas al año.
Ventas de Renfe a nivel internacional
Por otra parte, la compañía espera que la actividad internacional aporte el 10% de los ingresos del grupo en 2028, para lo que a comienzos de este año se constituyó Renfe Proyectos Internacionales. Francia es el primer mercado extranjero en el que Renfe opera en solitario, un movimiento que espera replicar a continuación en otros mercados, especialmente en Centroeuropa, aprovechando la liberalización de las obligaciones de servicio público (OSP).
Para ello, tiene una participación del 50% en la checa Leo Express, que le da entrada en Alemania, Eslovaquia, República Checa o Polonia y no descarta alianzas puntuales en otros mercados europeos. Ya está operando trenes en Chequia y Esclovaquia y líneas de autobuses en Polonia.
Arabia y EEUU, otros de los objetivos
El proyecto en Estados Unidos del AVE entre Houston y Dallas está pendiente de que los promotores consigan financiación con fondos federales, momento en el que empezaría la construcción de la infraestructura.
Los países árabes se encuentran también en el punto de mira de la compañía española para sus proyectos de alta velocidad, tras la positiva experiencia en la operación del AVE que une Medina con La Meca, en Arabia Saudí, que transporta más de 350.000 viajeros al mes (por encima de las cifras del AVE Madrid-Barcelona).
La operadora española participa también (en consorcio con la ingeniería DB e Ineco) en los proyectos Rail Baltica, para la explotación de la línea que unirá las tres capitales bálticas entre sí y con la red europea; y el Tren Maya, en México, en el que será el "operador sombra" del contratante, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo.
La entrada de Renfe en Francia
Renfe ha impulsado su entrada en Francia después de que la sociedad pública de ferrocarriles francesa, SNCF, rompiera hace un año de forma unilateral Elipsos, la sociedad que compartían ambas empresas, con la que operaban líneas entre los dos países. La francesa argumentó entonces que los servicios eran deficitarios y que las pérdidas en diez años sumaban 10 millones de euros.
La ruptura se produjo poco más de un año después de que SNCF entrara en España con su marca de alta velocidad y bajo coste, Ouigo, con la que presta servicio en los corredores que unen Madrid con Cataluña (Barcelona) y con la costa levantina (Valencia y Alicante).
Los planes de Ouigo
El próximo año, también Ouigo espera iniciar también las operaciones en los enlaces con Andalucía, trayectos para el que está en proceso de homologación de los trenes. Después de disolver la sociedad conjunta, SNCF comenzó a operar en solitario, en diciembre del año pasado, el servicio de alta velocidad ferroviaria entre Barcelona y París, tiempo en el que el TGV Inoui ha transportado a un millón de viajeros, con unos ratios de ocupación de en torno al 80%.
