Comisarios lucharán por no ser el rival más débil ante examen de Eurocámara

  • Los comisarios designados por Jean-Claude Juncker para formar parte del Ejecutivo comunitario los próximos cinco años lucharán en sus respectivas audiencias por no ser el rival más débil ante una Eurocámara que no está dispuesta a someterse al único designio de las capitales.

Lara Malvesí

Bruselas, 21 sep.- Los comisarios designados por Jean-Claude Juncker para formar parte del Ejecutivo comunitario los próximos cinco años lucharán en sus respectivas audiencias por no ser el rival más débil ante una Eurocámara que no está dispuesta a someterse al único designio de las capitales.

"Sin el visto bueno de la Eurocámara esta Comisión no podrá ser", reconoció el propio Juncker al presentar al equipo con el que quiere trabajar y en referencia a los exámenes a los que se someterán los nuevos comisarios entre el 29 de septiembre y el 7 de octubre.

El húngaro Tibor Navracsics (Educación, Cultura, Juventud y Ciudadanía), la rumana Corina Cretu (Política Regional), el maltés Karmenu Vella (Medio Ambiennte, Asuntos Marítimos y Pesca) o la eslovena Alenka Bratusek (vicepresidenta de Unión Energética), entre otros, son algunos de los que parten en peor posición para aprobar con éxito las audiencias.

Navracsics, responsable del ministerio de Justicia cuando el Gobierno conservador de Víktor Orbán modificó el sistema judicial y fue cuestionado por la actual Comisión Europea, es para algunos partidos una opción polémica a la hora de ocupar una cartera como la de Educación.

Tampoco lo tendrá fácil la rumana Corina Cretu, conocida en su país entre otros asuntos por la revelación de unos correos electrónicos en los que se dejaba entrever una relación personal con el ex secretario de Estado de Estados Unidos Colin Powell.

Cretu no es para algunos eurodiputados la mejor opción para liderar la política regional europea por el gran número de expedientes de abuso que Bruselas ha abierto contra Bucarest en este ámbito.

Discutida es también la designación del maltés Vella como comisario de Medio Ambiente, Asuntos Marítimos y Pesca, por los grupos de la izquierda de la Eurocámara dada su poca experiencia, según denuncian.

Al frente de una cartera de Inmigración ha sorprendido que se postule a un exministro de Defensa griego, un país cuya política de asilo ha sido denunciada por el propio Ejecutivo comunitario, así como por diversas ONG.

Alenka Bratusek, por su parte, ex primera ministra eslovena, será contestada por los eurodiputados de su país en la audiencia en la Eurocámara, pues la mayoría la acusa de postularse a sí misma y de buscarse una salida política dorada después de perder las elecciones y mientras su partido formaba parte del Gobierno interino.

Su "autonominación" dio pie incluso a la apertura de un expediente ante la Comisión de Prevención de la Corrupción en su país.

También algunos eurodiputados han hecho referencia al español Miguel Arias Cañete, a quien Juncker le ha confiado la cartera de Acción por el Clima y Energía, y que para disipar cualquier sospecha sobre su independencia anunció esta semana que ha vendido las acciones que poseía en petroleras en España.

Desde los grupos políticos, nadie se atreve a pronosticar que el colegio de comisarios diseñado por el luxemburgués, a partir de las propuestas de los Estados miembros, pueda superar sin tacha alguna el examen de la Eurocámara que comienza en una semana y se cierra el 7 de octubre.

"No parece comprensible que las vicepresidencias del área económica hayan recaído en personas con un perfil de política de austeridad que parece incompatible con el plan de Juncker. Por otro lado, la elección de Cañete ha provocado revuelo en la prensa de toda Europa", dijo a Efe el eurodiputado Javier López (PSOE).

Crítico con el candidato español se mostró también Ernest Urtasun (ICV), del grupo parlamentario de los Verdes europeos, que calificó de "escándalo" su nombramiento y dijo que "muchas organizaciones ecologistas reclaman su retirada".

Apoyando por contra su candidatura, su compañero del PPE Antonio López-Istúriz, que alabó el gesto de Cañete de sus acciones en la industria petrolera.

"No tenía ninguna obligación legal de hacerlo. Lo ha juzgado oportuno para que no haya luego dudas y ya está. Miguel Arias está deseando poder sentarse a trabajar cuanto antes y en la audiencia estará listo para responder a todo", señaló.

Para el eurodiputado Francisco Sosa Wagner (UPyD), las probabilidades de que la CE diseñada por Juncker pase sin tacha el examen de la Eurocámara parece "muy poco viable", señaló a Efe. EFE

lmi/emm/ig

(Más información del Parlamento Europeo en www.euroefe.com)

Mostrar comentarios