Campaña electoral del 4-M

Ayuso 'camufla' las siglas del PP y se lanza a pescar votantes de Vox y PSOE

La candidata asume que su marca personal suma más que la de "populares" y por eso está impulsando mensajes como "Yo con Ayuso" o "libertad". Marca distancias con el argumentario oficial de Génova.

Ayuso 'camufla' las siglas del PP y se lanza a pescar votantes de PSOE y Vox
Ayuso 'camufla' las siglas del PP y se lanza a pescar votantes de PSOE y Vox
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Ayuso es Ayuso y su marca personal trasciende en estas elecciones por encima de las siglas del PP. Esta es la estrategia que ha fijado la presidenta madrileña y candidata a revalidar su mandato. Una estrategia con relativa distancia de Génova, como ya hizo Alberto Núñez Feijóo, y con un discurso propio. Isabel Díaz Ayuso no va a esconder en sus actos y carteles que pertenece al Partido Popular, pero sí está 'camuflando' el nombre de la formación que lidera Pablo Casado para impulsar los mensajes principales de su campaña y que giran en torno al lema "libertad".

En Sol, el cuartel general desde donde se está dirigiendo la campaña de Ayuso, tienen claro que la candidata suma más que las siglas del PP y por eso están centrando todos los mensajes en su nombre e imagen. Una muestra de ello es el spot lanzado el pasado fin de semana en el que se la veía corriendo por Madrid Río, por el centro de la ciudad, por el Zendal y en el que acababa esprintando para llegar a la sede de la Presidencia madrileña. En ese vídeo las siglas "PP Comunidad de Madrid" quedaban relegadas al último segundo, algo similar a lo que ocurre con su programa electoral, donde se ha optado por colocar en la parte inferior de su portada la palabra "Populares". 

Ayuso, en definitiva, no imitará la estrategia Feijóo, que ocultó deliberadamente las siglas PP en su campaña en Galicia. En Génova, de hecho, lamentan que "hubo que coger una lupa" para encontrarlas. Tampoco replicará a Alejandro Fernández en Cataluña, que las impulsó al máximo por encima de su nombre. En Madrid, en resumen, la candidata aporta más valor que las siglas y éstas han quedado en un segundo plano.

Esto no significa, explican fuentes cercanas a la presidenta, que Ayuso no se sienta identificada con el PP o con el proyecto que lidera Pablo Casado. Pero sí han optado en su equipo por marcar distancias con la imagen que representa Génova y con el argumentario de la cúpula nacional. Consideran en el 'ayusismo' que el electorado de la candidata es totalmente transversal, capaz de llegar a votantes dispares como los más "radicales" de Vox como a exsocialistas. "Ayuso puede llegar en este momento más allá que el PP", añaden. Eso han sabido verlo sus asesores y por eso están primando a la candidata. Ella es y será el epicentro de todo hasta el 4 de mayo.

Pero marcar estilo y argumentario propio no significa romper con el PP o, en concreto, con Casado. Ayuso y el presidente nacional mantienen una excelente relación personal y por eso la candidata, dicen en su entorno, nunca va a hacer nada que perjudique a su antiguo compañero de Nuevas Generaciones. Génova y Sol han fijado, por ejemplo, una coordinación que están liderando Javier Fernández-Lasquetty y el equipo de Casado. Fisuras entre los líderes no existen. De hecho, la candidata pidió libertad de movimientos y el líder nacional, como ya ocurrió con Feijóo, se la ha dado. Ambos participarán en el inicio de campaña, en el cierre y en algún acto conjunto más, como la conmemoración del Dos de Mayo. Ayuso, por tanto, contará con Casado en sus mítines.

Ayuso busca, por tanto, un voto transversal y su estrategia de campaña se va a dirigir a 'pescar' en todos los caladeros, confirman fuentes del PP. Unos caladeros donde, por cierto, Casado ha tenido problemas, como son los de Vox o los del propio PSOE con votantes desencantados con la estrategia del PSOE. El 'ayusismo' considera que podría llegar a captar a votantes de Sánchez, un espacio donde la dirección nacional no ha llegado. 

Respecto a Vox, la estrategia de Ayuso también difiere de la de Génova. Se está viendo ya en esta precampaña. Mientras Pablo Casado rompió relaciones con Santiago Abascal en la moción de censura de octubre cansado de ofensas y, desde entonces, la situación entre ambos líderes, que eran amigos personales, es de tensión, la candidata del PP ha optado por otra vía. Ayuso no ha citado al partido de Rocío Monasterio en ningún momento salvo en una ocasión: para solidarse con sus dirigentes tras los sucesos violentos de Vallecas de la pasada semana. Creen, en resumen, que pueden atraer a un buen número de madrileños que optaron por a Vox en las generales de noviembre de 2020.

Donde sí ha surgido algún roce entre Génova y Sol es en la relación entre los equipos de Ayuso y Casado, sus subalternos. Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de Ayuso, ha marcado una línea propia sin interferencias de Génova que está levantando alguna crítica interna en la sede central. Desde el PP de Madrid aseguran que quien tiene que estar informado de todo, que es Casado, lo está y restan importancia a estas "disfunciones". En la dirección nacional consideran que el discurso de Casado tiene que ser diferente al de la candidata para que cale en otros territorios. "Ayuso triunfa con ese discurso en Madrid pero en Andalucía, por ejemplo, no", aseguran.

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