La Comunidad de Madrid apenas logra localizar a entre cero y tres contactos por cada nuevo caso detectado en la región. Mientras los especialistas de Salud Pública y Atención Primaria piden refuerzos para llegar a la raíz de los focos... la Consejería de Sanidad ha dado un giro a los protocolos de las residencias. El departamento ha elaborado una nueva hoja de ruta que deja en manos del responsable de la residencia, la identificación de contactos estrechos en colaboración con la Sección de Epidemiología correspondiente
El documento, con fecha el pasado 17 de julio, recoge que, ante la aparición de un caso sospechoso dentro del centro que afecte a un residente, el profesional de enlace o el responsable de la residencia, deberá contactar con los profesionales de Atención Primaria, que valorarán si el caso presenta síntomas compatibles y solicitarán la PCR, que deberá realizarse en menos de 24 horas. Hasta aquí, el procedimiento no cambia respecto al resto de la ciudadanía.
A partir de entonces, la localización de los contactos estrechos queda en manos del responsable de la residencia que, junto con el área epidemiológica correspondiente, tendrá que llevar a cabo su identificación. ¿Quiénes forman parte de ese grupo de 'estrechos'? El texto mete en el mismo saco a cualquier persona que haya cuidado a un residente positivo, a miembros familiares o personas que tengan otro tipo de contacto físico parecido, pero también a todo aquel que haya coincidido con el nuevo afectado en el mismo lugar a una menos de dos metros -lo que incluye a los convivientes y las visitas-, durante más de un cuarto de hora sin protección.
Los contactos estrechos deberán permanecer en cuarentena durante los 14 días posteriores al último contacto con un caso confirmado con infección activa, por lo que serán ubicados en la zona de observación y vigilancia especial. A todos los contactos clasificados como estrechos se les realizará una PCR en las primeras 24 horas. Si el resultado de la PCR es negativo se mantendrá la cuarentena hasta el día 14.
Sin variación en el manejo de positivos
El reciente protocolo mantiene el aislamiento dentro del centro de todos aquellos ancianos que no cumplan los requisitos para ingresar en un hospital. "Los casos confirmados de residentes que no cumplan criterios de hospitalización deberán permanecer aislados, por lo que serán trasladados a la zona Covid del geriátrico", reza el documento. El profesional de enlace o el responsable del centro lo notificará de manera urgente a la Sección de Epidemiología.
Esta Sección valorará la situación y las medidas de control más apropiadas a la misma. Cumplimentará la encuesta epidemiológica del caso y asesorará al servicio médico de la residencia para la identificación de los contactos estrechos. El seguimiento y el alta de los casos será supervisado por el médico.
El seguimiento de los casos confirmados en trabajadores será llevado a cabo por la Mutua colaboradora con la Seguridad Social, ya que son considerados como accidente de trabajo. La Sección de Epidemiología cumplimentará la encuesta e identificará a los contactos estrechos familiares y sociales y a los residentes que hayan atendido. El SPRL identificará a los contactos estrechos entre los trabajadores.
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