La Habana, 22 mar.- El presidente de Cuba, Raúl Castro, realizó nuevos cambios de Gobierno con cierto aire de relevo generacional al sustituir al veterano vicepresidente José Ramón Fernández, de 88 años, por Miguel Díaz-Canel, que con 51 se consolida como una de las figuras políticas en ascenso.
Los medios cubanos, todos oficiales, divulgaron hoy la última remodelación en el gabinete del general Castro, que incluye además el nombramiento de dos nuevos ministros -uno de ellos una mujer- al frente de las carteras de Educación Superior y la de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
El movimiento más destacado es la "liberación" -según la terminología oficial- del conocido por los cubanos como "Gallego Fernández", uno de los dirigentes históricos de la revolución cubana y que ha sido vicepresidente del Consejo de Ministros desde 1981.
En su larga trayectoria política y militar, José Ramón Fernández dirigió las escuelas militares en las que se formaron los primeros oficiales del Ejército Rebelde, fue un estratega clave en la victoria de Cuba durante la invasión de Bahía Cochinos (1961) y durante años estuvo a cargo del Ministerio de Educación.
Desde 1997 es también presidente del Comité Olímpico de Cuba (COC), organismo en el que aparentemente mantendrá sus responsabilidades.
Fernández continuará en la vida política como asesor del presidente Raúl Castro debido a su "experiencia", "resultados positivos" y aportes en el sector educativo, según la nota oficial que informó de los cambios.
Para sustituirlo en la vicepresidencia del Consejo de Ministros, Raúl Castro ha decidido elevar a ese cargo al hasta ahora titular de Educación Superior, Miguel Díaz-Canel, una de las figuras más jóvenes y ascendentes del actual gabinete.
Díaz-Canel es un graduado de Ingeniería Electrónica que durante tres años trabajó como especialista de radio de las Fuerzas Armadas (FAR) y posteriormente ocupó diferentes cargos en el Buró Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas, de la que llegó a ser segundo secretario.
En 1993 pasó al trabajo profesional en el gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC, único) y posteriormente asumió como su primer secretario en dos provincias.
En 2003 integró el Buró Político del PCC por propuesta de Raúl Castro, entonces ministro de las FAR y quien, tras asumir la presidencia del país, lo puso a cargo de la cartera de Educación Superior, en 2009.
Díaz-Canel, también diputado a la Asamblea Nacional, fue ratificado en el Buró Político por el VI Congreso del Partido Comunista en abril de 2011.
Dentro de la remodelación conocida hoy el nuevo titular de Educación Superior será el número dos de esa cartera, Rodolfo Alarcón.
Otro de los cambios se produce en el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, que pasa a manos de Elba Rosa Pérez, quien desde 2006 es jefa del departamento de Ciencia del Comité Central del PCC.
Pérez se suma a la lista de mujeres promovidas por Raúl Castro en cargos ministeriales y sustituye a José Miyar Barrueco, de 79 años, que pasará a dirigir la nueva Organización Superior de Dirección Empresarial encargada de atender la investigación, desarrollo, producción y comercialización de medicamentos.
Analistas consultados hoy por Efe destacaron el "ascenso" de Díaz-Canel como lo más notable de la nueva reestructuración, porque se ratifica una "tendencia de renovación y relevo moderado" del cual él es una de las figuras "visibles" más importantes junto al también vicepresidente del Consejo de Ministros, Marino Murillo.
Murillo, de 51 años, entró al Buró Político del PCC en 2011, años después de que lo hiciera Díaz-Canel, pero fue nombrado antes que él como vicepresidente (también en 2011) a cargo de coordinar la implementación de las reformas económicas que impulsa el Gobierno para "actualizar" el socialismo cubano.
"Pero Murillo es un gestor económico, mientras Díaz-Canel es un político, un hombre de tribuna", subrayó un observador que considera al nuevo vicepresidente como "la figura clave" del relevo.
Tras la retirada de Fernández y la de Miyar Barruecos, los analistas creen que se da "un paso positivo" aunque contradictorio: se demuestra la "ancianidad de la cúpula" del sistema cubano y la ausencia de sustitutos visibles.
La necesidad del "relevo generacional" fue destacada por Raúl Castro en el último congreso del Partido Comunista (celebrado en abril de 2011), donde el presidente cubano abogó por el "rejuvenecimiento y la renovación" de los cargos políticos y estatales.
Castro, quien este año cumplirá 81 años, reprochó en ese cónclave la carencia de una "reserva de sustitutos" para preparar ese relevo.
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