Estás preparado para una mañana un tanto intensa. Hay un nuevo puesto libre en la empresa y tú eres el encargado de llevar a cabo las entrevistas a los candidatos.
La mayoría de los entrevistadores les formularían a los candidatos al menos algunas de las preguntas más frecuentes en una entrevista de trabajo. Los intereses son varios. Para adquirir toda la información que necesitas se pueden utilizar varias técnicas. Y cada profesional tiene sus preferencias o las suyas propias. Como Peter Thiel, fundador de Paypal, que estuvo mucho tiempo dándole vueltas a alguna pregunta que pudiera revelar mejor la personalidad de un candidato a un puesto de trabajo, hasta que dio con ella.
Es importante que estés pendiente de su comportamiento. Pendiente a los detalles, ya que sus gestos y sus silencios pueden contarte más sobre el candidato que las respuestas a tus preguntas, ya sean trampa y de verdadero interés responsable.
Pero te interesa saber cuan calificado es el candidato al que estás entrevistando. Y para eso ya sabes lo que tienes que hacer: sseguir el consejo de Jeff Haden.
Jeff Haden y su pregunta comodín
Haden es escritor, orador y un gran 'influencer' dentro de la plataforma LinkedIn. Él tiene la teoría de que hay una pregunta que se puede reformular según la oferta de trabajo en cuestión y que es la definitiva para decidir si el candidato es el ideal para el puesto.
En su teoría, desecha las preguntas enlatadas que no llevan a ningún sitio y en su lugar aconseja, una vez hayas pasado la primera pequeña charla, “hacer una pregunta buena y convincente que, para los grandes candidatos, provocará conversaciones reveladoras”, explica en un artículo para 'Inc.'
La pregunta: "¿Qué habilidad de las que posees aportará más a nuestra línea de trabajo?"
Haden defiende a capa y espada la valía de esta pregunta por diferentes razones. Según él, permitiría que inmediatamente te enteraras si el candidato sabe algo acerca de tu empresa. “Y lo que es más importante, comienzas a comprender qué valor puede proporcionar el empleado y si sus fortalezas realmente satisfacen tus necesidades”, dice.
El orden de acción de la entrevista debe seguir este orden: preguntar, escuchar y conversar. Por eso, una vez que hayas lanzado la pregunta comodín, te toca escuchar la respuesta del candidato: piensa en lo que dice y no en la siguiente pregunta de tu lista.
Una vez escuchada la respuesta del candidato. Debes solicitar un ejemplo. Un desarrollo de alguna experiencia anterior en el que queden claros los beneficios de esta habilidad.
¿Cómo elaborar la pregunta?
“Primero, debes pensar en lo que realmente necesitas: las habilidades duras, las habilidades blandas y las de liderazgo. No pienses en las calificaciones del candidato perfecto, sino en lo que realmente haría la persona perfecta en este puesto. Porque después de todo, no contratas títulos”, dice Haden.
Después hay que pensar en la pregunta que pueda formar la base para una conversación reflexiva. De hecho, Haden invita a que uses la suya, solo que redireccionada a la labor del puesto de trabajo.
Por ejemplo: ‘¿Cuál es la habilidad que posees y que más contribuirá a atraer clientes importantes para nosotros?’, sería la pregunta perfecta si el puesto es de vendedor. “El objetivo es elaborar una pregunta que sirva como el tronco de un enorme árbol conversacional y te permita ramificarse en varias direcciones. Aprenderás mucho más de lo que lo harías siguiendo una guía de preguntas enlatadas, porque las respuestas más reveladoras son siempre las preguntas de seguimiento”, asegura Haden.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios