El bitcoin es infiel: llega la criptomoneda islámica que sí cumple con la sharía

  • Una 'startup' de Dubai crea una divisa virtual que garantiza que cada moneda equivalga a un gramo de oro, conforme a lo dictado por el Corán.
La nueva moneda tiene su equivalente exacto en oro / Onegram
La nueva moneda tiene su equivalente exacto en oro / Onegram

El cerco al mercado de las criptomonedas es cada vez más estrecho. Mientras que los grandes bancos recelan de una divisa virtual cuyo valor oscila con el viento, los gobiernos de todo el planeta plantean la necesidad de regular una moneda que precisamente se caracteriza por su carácter anónimo. De hecho Hacienda ha impulsado una campaña para recabar información de 16 grandes bancos y un total de más 60 entidades sobre las transacciones y los datos de los usuarios de bitcoins en España.

Y es que el problema es que la opacidad y, especialmente, la desregulación de un mercado sin una economía real detrás suscita más dudas que otra cosa. Especialmente en los países musulmanes, donde culturalmente no suelen especular en mercados sin bienes físicos. O eso es lo que sucedía hasta ahora, pues ya existe una criptomoneda que cumple con la Sharía, tal y como informa Quartz .

Las criptomonedas, contra la Sharia y la cultura musulmana

Países como Arabia Saudí o Emiratos Árabes Unidos, donde la confesión oficial es el islamismo, no han llegado a prohibir el intercambio de criptomonedas, si bien sus gobiernos han lanzado campañas para advertir a la población de los riesgos, mientras que en el resto de países musulmanes no tienen el mayor interés en el fenómeno: la mayoría de sus ciudadanos ni siquiera realiza depósitos en bancos por desconfiar del retorno de inversión de un intangible como es el propio dinero y aunque, en total, los países musulmanes representan el 1% de la economía del planeta, el mercado de las divisas virtuales apenas tiene presencia.

El credo musulmán considera que el bitcoin y las demás criptomonedas van en contra de la sharía -la ley islámica que constituye el cuerpo de la mayoría de los sistemas de derecho de estos países-, por lo que sin un bien tangible que respalde el mercado está moralmente prohibido. Algo que podría cambiar a partir de ahora, después de que OneGram, una startup de Debai, haya creado una criptomoneda respaldada en el bien de referencia más estable del mundo: el oro.

La garantía que ofrece OneGram es que cada moneda está respaldada por un gramo de oro físico guardado en una caja fuerte. Un sistema que permite evitar las grandes oscilaciones en el mercado y que, además, cumple con los principios islámicos de la sharía, tal y como la consultora de Dubai al-Maali ha certificado.

Usar el oro como garantía

El oro permanece como un valor de mercado relativamente estable. Por ejemplo, el año pasado osciló entre los 1.200 y los 1.350 dólares por onza, mientras que el precio de las criptomonedas -especialmente en el caso del bitcoin- fluctúa de un día para otro. Y, lo peor, sin ningún ente que pueda regular el mercado en caso de crisis: en 2017 llegó a valer 20.000 dólares por divisa, mientras que actualmente se sitúa en torno a los 7.000 dólares.

En este sentido, escoger el oro para respaldar a una criptomoneda no es algo arbitrario: en los mercados tradicionales, el preciado metal suele usarse como medida estandarizada para controlar y evaluar el funcionamiento de una economía, para que en el caso de una crisis siempre exista un bien tangible que sirva como moneda de cambio.

Es precisamente por ello por lo que no sólo los países islámicos utilizan el oro como garantía para los mercados de criptomonedas. Por ejemplo, en 2017 HelloGold empezó a operar en Malasia y pretende expandirse a Tailandia -los dos países del Sureste asiático con una mayor comunidad musulmana- durante este año y, en un futuro, dar el paso a Indonesia, donde el 80% de sus 250 millones de ciudadanos son musulmanes.

En cualquier caso, la idea de utilizar el oro para respaldar mercados de criptomonedas podría llegar a abrir la puerta a inversores de todo el mundo en países musulmanes en los que hasta ahora no podían. Y, de hecho, también podría convertirse en una solución a los mercados de criptodivisas desregulados actualmente en Occidente.

Mostrar comentarios