Repunta en bolsa

Grifols promete un segundo semestre más fuerte bajo el mando único de Glanzmann

La firma catalana prevé que los menores costes del litro de sangre impulsen la expansión del ebitda a partir de julio y esperan crecer a nivel de producto en Estados Unidos, así como en otras regiones estratégicas. 

Grifols promete un segundo semestre más fuerte bajo el mando único de Glanzmann
Grifols promete un segundo semestre más fuerte bajo el mando único de Glanzmann. 
Grifols

Grifols anticipa una mejora de su negocio para este 2023. Tras una primera parte de año renqueante en la que ha registrado unos números rojos de 108 millones por la puesta en marcha de su ahorro de costes, la compañía confía en impulsar su beneficio bruto de explotación (Ebitda) durante la segunda parte del ejercicio, después de que haya rozado en marzo los 300 millones. En una conferencia con analistas tras la presentación de los resultados, Víctor Grifols Deu, que se ha estrenado como director de operaciones (COO), ha asegurado que la reducción del coste por litro de plasma sanguíneo contribuirá a impulsar sus ganancias

A los menores gastos, que se han reducido más de un 15% desde el pasado mes de julio, unido a la mayor obtención de plasma (+11%), también se une la menor compensación a los donantes, que fue más de un 25% inferior, permitiendo a la compañía catalana elevar sus ingresos entre enero y marzo un 23%, hasta situarse por encima de los 1.561 millones aupado por Biopharma. El hasta ahora CEO ha subrayado su apuesta por Estados Unidos, donde esperan seguir creciendo en productos, así como en otros mercados considerados estratégicos para el grupo.

De hecho, la previsión para este ejercicio pasa por cerrar con más de 1.700 millones de ebitda. La palabra "recuperación" es la que más ha sonado durante la presentación, especialmente en la intervención de Thomas Glanzmann, una vez que ya concentra todos los poderes ejecutivos. Desde este lunes Glanzmann es, de facto, el presidente y CEO del grupo, una posición desde la que ha defendido este nuevo cambio de rumbo que busca un modelo diferente de organización, "conducido por un nuevo liderazgo".

A este respecto, el sueco ha reiterado el plan del grupo de reducir su ratio de apalancamiento hasta 4 veces el ebitda a partir el próximo año, desde los 9.350 millones contabilizados a cierre del primer trimestre, que si bien se han reducido hasta 7 veces el beneficio bruto de explotación, se ha incrementado un ligero 1,7%. Así, tiene congelado el dividendo hasta que alcance este objetivo. Esta es una de las palancas sobre las que asienta la nueva hoja de ruta de Grifols después de un arranque de año que consideran "sólido", mientras avanzan en un plan respaldado por una nueva cultura.

Además de la creación de nuevas unidades de negocio, otro de los factores sobre los que se asienta este nuevo plan está enfocado en la gobernanza, concentrando todo el poder y la toma de decisiones en una persona ajena al negocio, pero con experiencia en el sector. Según ha explicado en la intervención, Raimon Grifols Roura -nuevo CCO- reportará directamente a Glanzmann, así como también lo hará Víctor Grifols (COO) y Alfredo Arroyo, actual director financiero (CFO). 

Sobre el plan de mejoras operativas que incluye el cierre de los centros menos eficientes y más de 2.000 despidos, han destacado el hecho de que el nivel de ahorro generado una vez que implementado el plan ascenderá a 450 millones de euros anuales, 50 millones más de los previstos inicialmente. Por último, acerca de su estrategia comercial han señalado que su posicionamiento pasa por el crecimiento sostenible, así como por acelerar la innovación y la integración de Biotest -el rival alemán que compró el año pasado-. Los analistas consultados por este medio coinciden en que se trata de unos "buenos resultados", mejores de lo esperado por el consenso. 

Mostrar comentarios