Frenar la inflación

Turquía dispara sus tipos de interés al 15% para apoyar a la lira en el mercado

Con esta decisión, el nuevo titular, Naci Agbal, ha dado un giro a la política monetaria del país euroasiático, pues por primera vez en más de un año los tipos de interés superan la tasa interanual de inflación.

El hundimiento de la lira pone contra las cuerdas al Banco Central de Turquía
El hundimiento de la lira pone contra las cuerdas al Banco Central de Turquía
Pixabay

Ofensiva monetaria en dirección opuesta a Europa y EEUU. El Banco Central de Turquía ha anunciado este jueves una subida de los tipos de interés en 475 puntos básicos, del 10,25% hasta el 15%, para frenar la inflación y estabilizar la lira, que lleva meses perdiendo valor.

"El comité de política monetaria ha decidido subir los tipos de la tasa clave de reposición a 7 días del 10,25 % al 15%", señala el banco en un comunicado publicado en su web al anunciar la medida, esperada después de que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, cambiara hace diez días al gobernador del Banco Central.

La nota subraya que "todos los fondos se entregarán mediante la tasa principal, que es la de reposición a una semana". Con esta decisión, el nuevo titular, Naci Agbal, ha dado un giro a la política monetaria del país euroasiático, pues por primera vez en más de un año los tipos de interés superan la tasa interanual de inflación, actualmente del 11,89%.

Hasta ahora la estrategia de la entidad financiera había sido la de mantener los tipos lo más bajo posible, en consonancia con las instrucciones de Erdogan, que en sus comparecencias públicas insiste a menudo en que los intereses altos perjudican la economía y aceleran la inflación.

Ayer mismo, el jefe del Estado repitió esta idea en una conferencia ante un foro económico, al plantear: "¿se puede invertir con intereses altos? ¿Se puede crear empleo, se puede producir? No, no se puede. No debemos aplastar a nuestros inversores con altos tipos de interés".

Sin embargo, fue el propio Erdogan quien sustituyó al gobernador del Banco Central, Murat Uysal, por el exministro de Finanzas Agbal, un día después de que la lira marcara nuevos mínimos históricos, al cambiarse a 10,14 unidades por euro y 8,55 por un dólar. En las sesiones siguientes, la moneda turca reaccionó positivamente al cambio en la cúpula del Banco central, subiendo un 10% hasta recuperar el nivel que tenía a finales de septiembre.

Al explicar la decisión de hoy, el Banco subraya que la "demanda nacional se fortalece gracias a los efectos atrasados por un fuerte impulso crediticio durante la pandemia, lo que afecta negativamente a la balanza comercial a través de las importaciones".

"Los efectos retardados de la depreciación de la lira turca, el aumento de los precios internacionales de los alimentos y el deterioro de las expectativas de inflación afectan negativamente a las perspectivas de inflación. Si bien los datos rastreados de noviembre apuntan a un aumento de la inflación debido a la reciente volatilidad del tipo de cambio, se estima que esto será temporal con la orientación decisiva de la política monetaria", concluye.

"Por ello, el Comité ha decidido implementar una política monetaria transparente, fuerte y más estricta para eliminar los riesgos de la inflación, contener las expectativas y restaurar el proceso de deflación", explica el comunicado de la autoridad monetaria.

La lira reaccionó de forma inmediata, con una apreciación del 1,5%, al hacerse pública la subida de los tipos, aunque poco después perdía la mitad de lo ganado y se cambiaba a 9,0 unidades/euro y 7,6/dólar. Del 8 al 15 de noviembre, la divisa registró su mejor semana en los mercados desde 1994 con una revalorización del 12%.

Mostrar comentarios