La compra de Opel por parte de PSA a General Motors, que se cerró en el mes de agosto, comienza a hacerse efectiva en la fábrica de en Figueruelas (Zaragoza). Los sindicatos negocian desde hace días el convenio colectivo con los nuevos dueños y han rechazado la primera propuesta, que incluía reducción del salario así como de los tiempos de descanso.
Porque el secretario general de la sección sindical de CCOO, José María Fernando, ha afirmado que la reducción de estos intervalos es "un hándicap insalvable" en la negociación. Es precisamente el tiempo de descanso en el que los trabajadores han puesto "el acento" en estos últimos años, en lugar de reclamar mejoras económicas, por lo que se ha convertido en una "inversión" para ellos.
La dirección de Opel/PSA ha solicitado una medida que no ha gustado a los sindicatos: la reducción de las pausas entre los turnos, tanto por la mañana como por la tarde. CCOO y UGT han rechazado la reducción de tres minutos de la pausa del bocadillo (de 18 a 15 minutos) así como el descanso largo (de 40 a 22 minutos).
Los sindicatos han asegurado que la propuesta inicial también incluía una rebaja salarial del 6 % para 2018, la congelación del sueldo en los próximos cuatro años y la reducción de los pluses de nocturnidad, festivos y calendario especial que ofrece la compañía en su propuesta de convenio colectivo. También el número de fines de semana que tienen que trabajar los empleados, que pasaría de 15 a 20, incluyendo el sábado por la tarde como jornada laboral.
CCOO y UGT han afirmado que este jueves volverá a celebrarse otra reunión de la comisión negociadora, en la que los sindicatos presentarán sus propias propuestas a los directivos de la empresa.
La secretaria general de Industria de CC.OO. Aragón, Ana Sánchez,, ha asegurado que “si de verdad se tenía tanta prisa por negociar el convenio, no tiene mucho sentido" esta propuesta de la dirección de la empresa, ha considerado Sánchez, quien ha indicado que los sindicatos van a ir "paso a paso", recalcando el rechazo "unánime" del comité de empresa, que considera "inaceptable" que la 'línea roja' sea "decrecer en condiciones económicas y bienestar".
Fuentes de la empresa han asegurado que se han planteado las condiciones para igualar la planta de Opel en Figueruelas a las condiciones de competitividad de la planta que PSA tiene en Vigo ya que que ambas fábricas están en España y producen modelos similares.
Este convenio será clave en el futuro de la planta, ya que está en juego el posicionamiento de Figueruelas de cara a la fabricación del nuevo Opel Corsa, "todas sus variantes y más modelos", según destaca el director general de la marca, Antonio Cobo.
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