Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, ha confiado hoy en que se pueda llegar a un acuerdo en los próximos diez días para poder exportar grano desde los puertos marítimos de Ucrania, que están bloqueados por la invasión rusa y así, poder cubrir la crisis alimentaria en muchos países de África y Asia. Sin embargo, este martes Ucrania denunció que Rusia está exportando grano robado de todos los territorios ocupados y lo traslada a Turquía, según una investigación del programa audiovisual Skhemy que produce Radio Free Europe.
La investigación, realizada por la agencia ucraniana Ukrainska Pravda, afirmaría que no se han cumplido las promesas de las autoridades turcas de que se abstendrían de comprar grano ucraniano robado por Rusia de los territorios ocupados. Asimismo, los informadores confirman que "los agresores rusos apagan los radares de los barcos que transportan grano ucraniano desde (la península de) Crimea -ocupada por los rusos- a los puertos turcos". Se demuestra mediante un proceso sistemático que se documenta a base de imágenes de satélite.
"Queremos continuar siendo un intermediario. Intentaremos intensificar y finalizar las negociaciones en un plan de una semana a diez días", afirmó el presidente turco en Ankara, durante una rueda de prensa con el primer ministro italiano, Mario Draghi. Turquía se ha ofrecido a establecer una mediación entre Rusia y Ucrania para llegar a un pacto, bajo el paraguas de Naciones Unidas, que permita sacar grano de los puertos ucranianos a través del Mar Negro, y que ofrezca garantías a Rusia de que los barcos no volverán a puerto con armas.
Por otro lado, el Gobierno británico ofrecerá asesoramiento a Ucrania para ampliar y desarrollar rutas marítimas sin ningún peligro, al tiempo que donará materiales por el valor de 10 millones de libras (11,6 millones de euros) para reconstruir las vías ferroviarias y que se pueda exportar así por tren. Johnson pedirá a los sujetos del G7 que se sumen también a una iniciativa en la que invertirá 1,5 millones de libras (1,74 millones de euros) en establecer un proceso que permita distinguir si el grano vendido por Rusia en el mercado mundial ha sido tomado o no ilegalmente de Ucrania.
Los gobiernos podrían tomar así medidas que garantizasen que Ucrania pudiera obtener los ingresos procedentes de sus cultivos, afirma el Gobierno británico. Johnson recalca además que el bloqueo a las exportaciones ucranianas está provocando escasez en gran cantidad de países. "Los actos de Putin en Ucrania tienen consecuencias terribles en todo el mundo; han elevado los precios de la energía y los alimentos, y millones de personas están al borde de la hambruna", afirma el primer ministro británico. "Los líderes mundiales debemos unirnos y usar nuestro peso económico y político para ayudar a Ucrania y facilitar las cosas a los hogares de todo el mundo", concluirá.
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