Retira una polémica propuesta sobre paro 

Las críticas llevan al gobierno francés a  dialogar sobre el retraso de la jubilación

La primera ministra francesa, Borne, reconoció en una entrevista a la emisora France Info que 65 años "no es un tótem". El próximo 10 de enero se presentará el plan de forma íntegra. 

El Gobierno de Macron dispuesto a negociar el retraso en edad de jubilación
El Gobierno de Macron dispuesto a negociar el retraso en edad de jubilación
DPA vía Europa Press

La primera ministra francesa, Elisabeth Borne, ha dado un paso atrás en los planes del gobierno galo sobre el retraso de la edad mínima de jubilación. En su estrategia inicial, el ejecutivo francés quería fijar en 65 años la edad mínima de jubilación.  Borne, que inicia una última ronda de conversaciones de dos días con sindicatos y patronal antes de presentar en detalle su reforma el próximo día 10, reconoció en una entrevista a la emisora France Info -y recoge Efe- que 65 años "no es un tótem" y que "las discusiones continúan y van a continuar". 

Añadió que, además de elevar esa edad mínima de jubilación de los 62 años actuales, hay otros parámetros que están en la mesa de negociación cuyas modificaciones podrían ayudar a equilibrar la financiación del sistema de pensiones en el horizonte de 2030. También ha anunciado que el ejecutivo francés va a retirar un controvertido dispositivo para reducir el periodo de cobro del subsidio de desempleo en caso de que la tasa de paro bajara del 6%, y que había suscitado el rechazo frontal de todos los sindicatos. "Entiendo que tal vez ese punto no ha sido objeto de suficientes discusiones, de forma que vamos a retirarlo", indicó.

El Ejecutivo del presidente Emmanuel Macron ha publicado un decreto para modificar las condiciones del cobro del subsidio de desempleo que entrará en vigor el 1 de febrero y se inspira en Canadá. El principio es que las reglas de indemnización por desempleo deben ser más estrictas cuando hay muchos puestos de trabajo sin cubrir y más protectoras cuando el paro es elevado.

En concreto, como ahora la tasa de paro es del 7,3%, por debajo del umbral del 9% que se ha fijado como referente, el periodo en que los parados podrán recibir el subsidio de paro se va a reducir en un 25%, con un mínimo de seis meses. Eso significa que los que ahora tienen derecho a 18 meses de indemnización, sólo lo cobrarán durante 12 meses.

Pero además, otro dispositivo más polémico que incluía el decreto, y que ahora se va a eliminar, contemplaba que el periodo de indemnización se redujera en un 40% si la tasa de paro caída por debajo del 6%. Borne señaló que "nuestra intención es transparente", y que el objetivo es recortar las indemnizaciones cuando el paro sea inferior a ese 6 , pero como esa situación no se da por el momento, "retiramos esta regla y la volveremos a poner en la concertación para las futuras reglas". 

Las líneas rojas que no se van a cruzar con esta reforma

En cualquier caso, puntualizó que no se aumentará el periodo de cotización necesario para cobrar una pensión completa, que en virtud de la precedente reforma de las pensiones va a subir hasta 43 años, y que tampoco cambiará la edad de jubilación para cobrar esa pensión completa cuando no se llegue a 43 años de cotización, 67 años.

La primera ministra descartó un aumento de las cotizaciones, tanto las patronales como las que pagan los trabajadores, y dijo que eso es "una línea roja". Su argumento es que no aumentar los costos laborales es lo que permitió crear un millón de empleos durante el primer mandato de Macron (2017-2022) y seguir en esa misma dinámica en el segundo. "No queremos aumentar las cotizaciones, no queremos aumentar el costo del trabajo", subrayó. Sobre la justificación de la reforma, Borne se remitió a los informes y a las proyecciones del Consejo de Orientación de las Pensiones (COR, un organismo público independiente), que son objeto de interpretaciones divergentes por parte de su Gobierno y de los sindicatos.

"Nuestro sistema de pensiones tiene un déficit estructural"

Según la primera ministra, las cifras del COR "muestran que nuestro sistema de pensiones tiene un déficit estructural y lo va a seguir teniendo" y "nosotros queremos preservar el sistema de reparto" en el que son los cotizantes de cada momento los que pagan las pensiones de los jubilados. Hizo hincapié en que la relación entre cotizantes y jubilados está bajando: se ha pasado de 2 cotizantes por cada jubilado en 2005 a 1,7 actualmente y disminuirá a 1,5 en el futuro. Por eso, insistió en que "si no queremos dejar una deuda para las generaciones futuras (...) hay que trabajar más tiempo".

Una reforma todavía a merced de la decisión del parlamento

La reforma de las pensiones que el Gobierno del presidente Emmanuel Macron presentará el martes de la semana próxima se adoptará en Consejo de Ministros el 23 de enero para que pueda iniciar su trámite parlamentario a comienzos de febrero, con el objetivo de que las dos cámaras lo adopten durante el primer trimestre, según el calendario de la primera ministra.

El problema es que su Ejecutivo necesitará el apoyo de otros grupos políticos, ya que Macron no dispone de mayoría suficiente, y la oposición de izquierdas y la ultraderecha de Marine Le Pen se oponen frontalmente. En principio, los únicos socios parecen ser el grupo de los conservadores: 'Los Republicanos'. Pero las mayores dificultades podrían estar en la calle, puesto que todos los sindicatos sin excepción se han manifestado frontalmente en contra del retraso de la edad de jubilación y han prometido movilizaciones que se anunciarán en los próximos días.

Mostrar comentarios