La pandemia 'encerró' a todos los españoles en sus casas durante más de tres meses, un periodo que hizo reflexionar a muchos sobre el valor que tienen las cuatro paredes que conforman su vivienda. Así, la Covid despertó una nostalgia por lo rural que aumentó las transacciones en torno a las propiedades de mayor tamaño y zonas alejadas de las urbes. De Galicia a Andalucía, pasando por el País Vasco, Aragón y Castilla La Mancha... La oferta en España de pazos, caseríos, fincas y masías deslumbra a todos los que navegan por los portales de internet con el deseo de adquirir este tipo de inmuebles para disfrutar de una propiedad con atractivos como jardines, terrazas y piscinas.
El portal Idealista presenta varios ejemplos como este pazo gallego de 380 metros cuadrados en una finca de casi una hectárea ubicado en el municipio de Tomiño. El inmueble está rodeado por montes y viñedos que crean un microclima óptimo para plantar rosales, claveles y hortensias en el jardín. El edificio principal acumula tres plantas en dos alturas, pero el terreno también incluye una casa de recreo con un horno de leña integrado, una piscina y un pequeño invernadero de cristal con sala de lectura. Además, existe una plantación de kiwi con un centenar de árboles. Para los interesados, el precio del inmueble supera el millón de euros.
El País Vasco también posee construcciones que derrochan esplendor como este caserío de ocho apartamentos reformados. El inmueble data del año 1507, cuando era utilizado como molino, y lo oferta la inmobiliaria Luxury Estate por 1,8 millones de euros. La propiedad está ubicada en Bakio, uno de los municipios costeros más emblemáticos de la costa bizcaina. La zona cuenta con escenarios como islas, acantilados, playas salvajes y, por supuesto, bodegas de txakoli.
Cataluña también tiene inmuebles sorprendentes en su catálogo, como la siguiente masía. El edificio principal se extiende en una superficie de 450 metros cuadrados en Girona. La inmobiliaria Lucas Fox explica en su página que la multiplicidad de espacios en el recinto responde a la voluntad de los propietarios de ofrecer un lugar de acogida para grupos. La construcción cuenta con más de ocho dormitorios, una biblioteca, un despacho y una sala polivalente perfecta para trabajos en equipo. Los compradores de la propiedad ofertada en 1,2 millones de euros podrán gozar de una zona exterior cubierta con porches y terrazas que suma 160 metros cuadrados, más otra área de baracoa y un espacio de taller complementario. A todo esto también hay que sumarle las tres construcciones complementarias destinadas al almacenaje de material de jardinería.
Toledo no se queda atrás con la siguiente finca. Esta exclusiva propiedad que gestiona Lançois Doval está ubicada a 2,5 kilómetros de la ciudad y la conforman dos parcelas que se extienden en una superficie de más de 10 hectáreas. Una de estas alberga la casa construida en 1972 que cuenta con paneles de azulejos del siglo XVI y XVII instalados para formar zócalos y encuadrar las ventanas y chimeneas. El inmueble tiene dos plantas, seis dormitorios, piscina con vestuarios y un jardín que acoge amplias terrazas y porches para contemplar las vistas de la ciudad.
Aragón no se queda atrás y ostenta inmuebles como esta finca rústica que se vende por cuatro millones de euros en el portal Fotocasa. El activo es un complejo hotelero rural del siglo XVI ubicado en el pueblo Humo de Muro, en Huesca. El recinto dispone de un restaurante en las bodegas, un salón de banquetes, apartamentos y habitaciones, un jacuzzi exterior con vistas a la montaña, un sauna en el torreón, barbacoa exterior... y un zoo para familiarizarse con varias especies animales. Es una propiedad perfecta para los amantes de la naturaleza y la hostelería.
Para dimensionar la magnitud de la siguiente joya se necesita un plano...
Se trata de un cortijo de 612 metros cuadrados asentado en una finca de 3.600 metros cuadrados que también vende la inmobiliaria Lucas Fox por 1,2 millones de euros. El edificio se distribuye en torno al patio central de estilo árabe que tiene como núcleo una fuente rodeada por columnas y arcos que ofrecen una zona cubierta desde donde se puede acceder al resto de la vivienda. La finca alberga dos viviendas independientes que cuentan con sus salones, comedores, chimeneas y cocinas equipadas. El atractivo del inmueble crece por estar 'encerrado' entre amplios jardines, terrazas y piscinas con vistas al valle del Guadalhorce.
Este recorrido apto para soñadores representa solo una pequeña mirada a la amplia oferta de inmuebles especiales que se pueden encontrar en España. Sus precios no están al alcance de todos, pero sí sus vistas. El interés en este tipo de propiedades ha crecido en los últimos meses por el valor que han adquirido los metros cuadrados de espacios verdes y los 'paseos en casa' para cuidar de la salud.
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