CCOO ha puesto en valor la actuación del equipo de bomberos en el accidente ocurrido en la central nuclear de Ascó I (Tarragona) que permitió desalojar el espacio y, en especial, la del bombero que murió y cuya labor "salvó la vida de una trabajadora", a la que pudo sacar de la zona de peligro antes de fallecer. El accidente se produjo cuando, por causas que todavía se desconocen, se disparó el dióxido de carbono (CO2) del sistema contra incendios, lo que afectó a un bombero de la empresa Falck, que opera dentro de las instalaciones de la nuclear, que falleció.
En un comunicado, el sindicato lamenta la muerte del bombero y transmite su apoyo a la familia y a las otras tres personas que resultaron heridas y que evolucionan favorablemente. Los Bomberos de la Generalitat también han trasladado, en un tuit, el pésame a la familia y amigos del fallecido, del que han destacado que era un antiguo voluntario de este cuerpo y que ayer perdió la vida en el ejercicio de su cargo. Este mediodía se llevarán a cabo tres minutos de silencio en la central de Ascó en recuerdo del trabajador muerto y en apoyo a los heridos.
CSN califica de nivel 0 el incidente
El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha señalado que el suceso ocurrido ayer en la central no ha tenido impacto y lo califica de nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES). El miércoles por la tarde un bombero de la brigada contra incendios de la citada nuclear falleció por la inhalación de dióxido de carbono proveniente de una descarga de este gas en el edificio eléctrico, cuando se realizaban labores de mantenimiento en un área fuera de la zona radiológica.
Como consecuencia de esta descarga, también se vieron afectados otros tres trabajadores que se encontraban trabajando en la misma zona del edificio; Estos fueron trasladados al hospital comarcal de Móra d'Ebre con pronóstico leve, ha precisado el CSN en un comunicado. El regulador nuclear ha detallado que las investigaciones apuntan a que el bombero fallecido se había desplazado hasta la cota +35 del edificio eléctrico para socorrer a las personas que se encontraban realizando labores de mantenimiento del sistema de protección contra incendios, cuando se produjo la inhalación de dióxido de carbono.
En el momento de la notificación, por parte del titular de la central nuclear, la planta se encontraba en modo 3 (espera caliente), es decir, estaba el reactor parado y con la temperatura media del refrigerante en valores nominales; la central estaba en proceso de arranque tras la 28ª recarga de combustible que se inició a mediados de octubre. El CSN, según se establece en sus procedimientos, ha informado a través de su página web de la recepción de notificación de este suceso y, con la información disponible hasta este momento, se clasifica con nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES).
