Estudio de seroprevalencia

Uno de cada diez españoles ha pasado la Covid a días de la llegada de la vacuna

La cuarta oleada de la encuesta que busca conocer cuántos ciudadanos han pasado la infección apunta a que el 9,9% de la población ya la ha padecido. 

Vacuna
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EFE/ Jesús Diges/Archivo

El 9,9% de españoles ya ha pasado el coronavirus. Así lo reflejan los resultados preliminares de la cuarta oleada del estudio de seroprevalencia, la encuesta epidemiológica que busca conocer cuántas personas han estado contagiados en algún momento desde que comenzó la pandemia el pasado mes de marzo. Un porcentaje que apunta a que uno de cada diez habitantes han padecido en algún momento la Covid-19. En números totales, esto significaría que cerca de 4,7 millones de españoles ya cuenta con anticuerpos frente al virus. Cifra insuficiente para lograr la ansiada inmunidad de grupo, que se sitúa entre el 60% y el 70%. Y que se conoce a días de que empiece la campaña de vacunación, después de que la Agencia Europea del Medicamento haya adelantado su reunión para aprobar la vacuna de Pfizer, que será la primera inmunización disponible en la UE. 

Estos datos, recopilados por el Centro Nacional de Epidemiología y el Instituto de Salud Carlos III, y que han sido obtenidos tras la realización de test rápidos de anticuerpos a más de 51.000 participantes, permiten ver la evolución de la seroprevalencia en España. En la primera oleada del estudio, que se realizó cuando la población permanecía confinada, el porcentaje de ciudadanos con anticuerpos rondaba el 5%. Medio año después, y tras el paso del verano y de la segunda ola de coronavirus, hay el doble de ciudadanos inmunizados. Lo que evidencia la dureza con la que ha impactado el virus sobre la sociedad en los últimos seis meses. 

Las provincias españoles con los mayores porcentajes no cambian con respecto a las anteriores entregas de la encuesta. La que cuenta con más población inmunizada es Cuenca, que alcanza el 18,7% si se tienen en cuenta las cuatro entregas del estudio. Le siguen otros dos territorios, Soria y Madrid, que alcanzan el 18,6% de ciudadanos con anticuerpos. Estos datos muestran las grandes concentraciones de virus que se han dado tanto en Madrid como en Castilla-La Mancha y Castilla y León, como ha destacado la directora del Centro Nacional de Epidemiología, Marina Pollán. En el otro lado están Santa Cruz de Tenerife, A Coruña y Las Palmas, que apenas rondan el 4% de habitantes con anticuerpos.

Como ha señalado Pollán, que casi un 10% de españoles pueda tener anticuerpos no significa que el país se encuentre ya en un escenario de protección frente al coronavirus. "El primero caso acreditado de reinfección se ha dado en Madrid", ha recordado la científica para dejar claro que la inmunidad aún está muy lejos. Una idea en la que ha insistido la responsable del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), Raquel Yotti, que ha estado al frente de la encuesta. Y para seguir controlando la evolución de la pandemia, las expertas han anunciado que se llevarán a cabo una quinta y una sexta ola del estudio. Las cuales coincidirán con la campaña de vacunación. El trabajo de campo se realizará en febrero y en mayo de 2021, respectivamente. 

Yotti también ha aprovechado su intervención para rechazar que se usen los test de anticuerpos para hacer un autodiagnóstico. Según su explicación, estas pruebas solo son útiles "para determinar si se ha pasado la infección". En ningún caso, ha asegurado, sirven "para detectar una infección activa". "Los test rápidos tienen una precisión menor que los de laboratorio. Son útiles para hacer estimaciones, pero no para tomar decisiones a nivel individual. Nadie debería tomar decisiones con este tipo de test", ha defendido la responsable del ISCIII. 

El estudio se ha realizado precisamente con test rápidos como el de anticuerpos. Además, se han tomado muestras de sangre a más de 12.000 personas para hacer un análisis más pormenorizado y hacer una estimación más precisa de los niveles de anticuerpos en la población. El trabajo de campo ha vuelto a centrarse en hogares y unidades familiares, por lo que no se han realizado pruebas en entornos con mayores problemas contra el virus, como las residencias de ancianos. El 'pero' ha estado en que ha caído la participación con respecto a las anteriores oleadas, ya que como ha admitido Pollán "hay personas que están cansadas de acudir al mismo estudio". 

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