A dos días de la Cumbre Europea

Francia se enfrenta a Alemania para que avale los coches de combustión en 2035

El Parlamento Europeo aprobó la prohibición de vender coches que emiten CO2 a partir de 2035, pero para que la medida entre en vigor necesita el respaldo de los gobiernos de los Estados miembros del Consejo. 

Francia se enfrenta a Alemania para que avale los coches de combustión en 2035
Francia se enfrenta a Alemania para que avale los coches de combustión en 2035
Europa Press

La venta de coches de combustión se ve afectada por la intervención de Francia a Alemania. Según ha afirmado este martes la ministra francesa de Asuntos Europeos, Catherine Colonna  y a dos días de que arranque una cumbre de líderes europeos en Bruselas, el país francés le pide que deje de bloquear el acuerdo para prohibir la venta de coches de combustión a partir de 2035 en la Unión Europea (UE).

A la llegada de Colonna a una reunión con ministros y secretarios de Asuntos Europeos de los Veintisiete ha afirmado lograr un acuerdo que decía que no habría vehículos térmicos para 2035. "Creo que deberíamos mantenernos en lo que acordamos, y no tengo dudas de que los alemanes van a lograr un acuerdo dentro de su coalición (de gobierno)", ha explicado Colonna.

Este encuentro ha servido entre otras cosas, para avanzar en los preparativos de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE que tendrá lugar este jueves y viernes, y en la que coincidirán el presidente francés, Emmanuel Macron, y el canciller alemán, Olaf Scholz.

Principales temas que se tratarán en la cumbre

Según el orden del día oficial, la cumbre de líderes se centrará en tres temas, que son el apoyo a Ucrania, el impulso de la competitividad económica y la política energética, pero este martes la ministra francesa deslizó un asunto, el del fin de los coches de combustión, que enfrenta a Francia con Alemania. Además, Colonna también señaló el hecho de que esta cuestión divide en Alemania a los verdes y a los liberales, que son socios de coalición en el Gobierno tripartito encabezado por el socialdemócrata Scholz.

Así, a mediados de febrero, el Parlamento Europeo aprobó la prohibición de vender coches que emiten dióxido de carbono (CO2) a partir de 2035, pero para que la medida entre en vigor necesita el respaldo de los gobiernos de los Estados miembros, representados en el Consejo de la UE.

A principios de marzo, Alemania retrasó esta votación en el Consejo alegando que faltaba crear nuevas cláusulas para proteger a los vehículos con motor de combustión que utilicen combustibles sintéticos limpios, y el lunes pasado Berlín auspició una reunión en Estrasburgo (Francia) con ministros de Transportes de otros países, como Italia o Polonia, que van en la misma sintonía.

La energía nuclear, otro punto crítico franco-aleman

Francia es el principal defensor de la energía atómica dentro de la UE y, en este sentido, la ministra Colonna reivindicó el papel que ha jugado París para que en la futura reforma del mercado eléctrico la Comisión Europea "tenga en cuenta las capacidades nucleares existentes".

El uso de esta energía genera recelos entre los Estados miembros de la UE, Alemania y España, que la semana pasada mandaron, junto a cinco países más, una carta a Bruselas pidiendo que aparte cualquier referencia a la nuclear en la revisión de los objetivos de las energías renovables.

En la reforma del mercado eléctrico, que los Estados aún deben discutir, el Ejecutivo comunitario quiere que las renovables ganen más peso en un "mix" eléctrico en detrimento del gas, pero deja a cada país miembro la potestad de incluir dentro de este "mix" a la fuente energética que ellos consideren. A su llegada a la reunión preparatoria de la cumbre de líderes europeos, otros países como Croacia y Eslovaquia también señalaron como un punto clave el abordaje de esta reforma del mercado eléctrico.

La secretaria de Estado para Asuntos Europeos de Croacia, Andreja Metelko-Zgombic, cree que esta reforma "debería reducir las dependencias estratégicas" de la UE, mientras que para su homólogo eslovaco, Andrej Stancik, la prioridad es "sobrevivir con éxito al próximo invierno".

Inversión de 2.000 millones para Ucrania

La presidencia sueca del Consejo de la Unión Europeo (UE) bendijo el acuerdo que cerraron este lunes los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintisiete para entregar un millón de obuses a Ucrania, mediante una inversión de 2.000 millones. La ministra sueca de Asuntos Europeos, Jessica Roswall, apuntó que "está bien que hayan alcanzado este acuerdo" antes de que los presidentes y primeros ministros se vean, para que así, según dijo, "puedan confirmarlo" a finales de esta semana.

Por su parte, Finlandia aseveró que la invasión rusa de Ucrania "es una guerra que se resolverá en el campo de batalla", según dijo la ministra de Asuntos Europeos, Tytti Tuppurainen, que defendió la necesidad de "seguir imponiendo sanciones cada vez más fuertes para limitar la capacidad económica de Rusia". Suecia y Finlandia están, precisamente, a la espera de convertirse en miembros de pleno derecho de la OTAN, una vez sean ratificados por Turquía y Hungría.

Mostrar comentarios