Carmen Crespo, consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, ha expresado su discrepancia con los aranceles que "gravan" las exportaciones de aceituna negra en el mercado de Estados Unidos. Según la portavoz, las autoridades estadounidenses mantienen una visión "absolutamente contraria" a las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC),
Crespo ha recalcado que el organismo ya ha emitido hasta dos resoluciones en este sentido, por lo que "es momento de que, el Gobierno central solicite a la Unión Europea que se den los pasos necesarios para que esta situación se revierta". "No es sostenible para un sector clave como el de la aceituna de mesa de Andalucía el mantenimiento de esta prácticas arancelarias en un mercado con gran importancia estratégica", ha expresado la consejera.
El mercado de Estados Unidos fue el séptimo destino en 2023 de las ventas exteriores de la agroindustria de Andalucía, con un valor de compras de 965 millones de euros y más de 226.000 toneladas de productos.
La consejera ha expuesto que "desde el comienzo de esta situación injusta, el Gobierno de Andalucía ha estado del lado de los agricultores, de la mano con la Asociación Española de Exportadores e Industriales de Aceituna de Mesa (Asemesa), y hemos solicitado siempre una mayor diplomacia proactiva a la Unión Europea y la defensa de nuestro sector, para que se cumpla este dictamen".
El mercado de las aceitunas de mesa de Andalucía es líder en exportaciones en España, con un crecimiento durante el 2023 del 34,6%, hasta los 43 millones. "Estas cifras, en una campaña marcada por fuertemente la sequía, nos hacen confiar en la capacidad de resiliencia de nuestros agricultores, familias de andaluces arraigadas a un cultivo milenario que no sólo es fuente de vida y riqueza, sino también de fijación de la población en el mundo rural, por lo que todos los esfuerzos que realicemos por mejorar su competitividad y crecimiento están más que justificados", asegura Crespo.
Un mercado inaccesible
Crespo ha querido destacar el importante prejuicio que supone esta política arancelaria para el mercado de aceitunas, que ha sufrido un descenso en su expansión internacional dentro de este mercado clave, "situación que debe superarse para volver a la senda del crecimiento, para recoger los frutos que se han venido sembrando durante tantos años gracias a un producto sostenible y cardiosaludable como la aceituna de mesa de Andalucía, símbolo también de nuestra dieta mediterránea".
