El principal, y hasta ahora único, candidato para relevar a Juan Rosell al frente de la principal organización empresarial del país (CEOE), el presidente de Cepyme, Antonio Garamendi, ha tanteado al que fuera secretario de Estado de Economía con Luis de Guindos, Íñigo Fernández de Mesa, para incorporarlo en un puesto clave a su proyecto para la CEOE, según han confirmado a La Información fuentes del ámbito empresarial.
Garamendi y Fernández de Mesa mantienen una muy buena relación personal desde hace años y, según las fuentes consultadas, el empresario de Getxo -hasta ahora único aspirante a presidir CEOE en las elecciones convocadas para el próximo 21 de noviembre- ha pensado en él como pieza clave para ordenar la integración en la estructura directiva y funcional de la organización de las grandes empresas que ya forman parte de CEOE y pagan su cuota, pero que todavía no tienen reconocido estatutariamente el derecho a voto en sus órganos de gobierno.
El asunto -bastante peliagudo por la oposición de buena parte de las organizaciones sectoriales y territoriales a esa integración- es uno de los objetivos no completados del actual presidente, Juan Rosell, que pese a haber ampliado de forma sustancial la nómina de grandes empresas asociadas a CEOE (hasta 177) y haber conseguido con ello apuntalar las delicadas finanzas con las que la organización salió de la crisis, no ha logrado arbitrar un sistema de representación de éstas en la patronal.
Rosell no se ha dado por vencido y en su última Junta Directiva como presidente de CEOE planteará una propuesta para dar entrada a las grandes empresas asociadas, entre las que se cuentan Santander, Telefónica, Google, Iberia, Merlin Properties, Mercadona, Repsol o Eulen.
Un gran 'laboratorio de ideas empresarial'
Antonio Garamendi también tiene un plan. Fuentes cercanas al presidente de Cepyme avanzan que uno de los proyectos que tiene en mente es crear un gran servicio de estudios empresarial que agregue un conocimiento ahora disperso en diferentes institutos de análisis y departamentos de grandes corporaciones, de forma que se convierta en el referente del pensamiento empresarial en España.
El plan de Garamendi es situar a Íñigo Fernández de Mesa como cabeza visible de este proyecto y principal responsable de una reforzada área de Economía y Estudios de CEOE, cuya visibilidad pública e influencia considera crítico reforzar durante los próximos cuatro años. El ex número dos de De Guindos también se sentaría en el Comité Ejecutivo, el órgano permanente de gobierno de la patronal, y podría ser además el responsable de su futura comisión de economía.
Según las fuentes consultadas, las responsabilidades de Fernández de Mesa no se quedaría en el plano orgánico sino que trascenderían también al ámbito institucional, ya que se pretende que se convierta en el enlace de la CEOE con las grandes empresas del país e incluso con el Gobierno.
Íñigo Fernández de Mesa fue secretario de Estado de Economía con Luis de Guindos entre los años 2014 y 2016. Tras su paso por el Gobierno volvió al mundo de la banca de inversión, donde ya había trabajado anteriormente en entidades como Barclays o Lehmann Brothers, y se incorporó al equipo de Rothschild como 'senior advisor' en el ámbito de Políticas Públicas, hasta que en julio de 2017 fue nombrado presidente de la entidad para España. Su nombre sonó también para el consejo de Scottish Power, la filial británica de Iberdrola, pero el movimiento no terminó de prosperar.
Garamendi perfila su equipo de trabajo en CEOE
Íñigo Fernández de Mesa es la gran apuesta de Antonio Garamendi para la nueva CEOE que saldrá del próximo 21 de noviembre, y en la que también podría haber otros cambios, según han adelantado a La Información fuentes empresariales.
Las fuentes consultadas apuntan a una posible ampliación del Comité Ejecutivo de cuatro a cinco Vicepresidencias para dar cabida a las tres grandes territoriales actualmente representadas: Juan Pablo Lázaro (Madrid), Josep Sánchez Llibre como probable sucesor de Joaquín Gay de Montellá en Foment del Treball, la patronal catalana; y Salvador Navarro, como presidente de la Confederación de Empresarios de la Comunitat Valenciana en sustitución del ex presidente de la ya desaparecida Cierval, José Vicente González. Las otras dos vicepresidencias las ocuparían Pilar González de Frutos, la presidenta de la patronal del seguro Unespa; y el futuro presidente de Cepyme en sustitución del propio Garamendi, un cargo para el que suena con fuerza Gerardo Cuerva, máximo responsable de la patronal granadina.
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