En un encuentro celebrado en la Universidad de Navarra el pasado 19 de diciembre, los profesores Alberto Andreu y Álvaro Lleó presentaron su último barómetro en materia de responsabilidad corporativa, liderazgo y propósito empresarial. En la distendida charla, a la que pudo tener acceso 'La Información', ambos expertos argumentaban que uno de los principales problemas a los que se enfrentan las empresas actualmente es la captación y conservación del talento joven, concretamente de la llamada "generación Z".
Los demógrafos de población señalan que la "generación Z" es aquella nacida desde mediados o finales de la década de 1990 hasta mediados de la década de los 2000. Esta generación ha crecido utilizando Internet y productos tecnológicos desde muy jóvenes, por lo que su acercamiento y disposición en el mercado laboral son diferentes a las de generaciones predecesoras. Para Andreu y Lleó, uno de los objetivos no financieros principales de la empresa es definir el propósito corporativo, y alinearlo con los objetivos personales de sus empleados; sin embargo, las nuevas generaciones dificultan este proceso.
Aseguran que el empleo de estos jóvenes presenta índices de rotación altísimos, cercanos al 40%, y la duración de los primeros empleos que consiguen no llega de media a los 18 meses. La principal razón, según los profesores, es obviamente el salario percibido, pero existen más razones que alejan a la generación Z y dificultan la conservación. Para Andreu, una de las causas surge antes, y al ser profesor universitario, cree que empieza en las aulas. Según indica un informe de la Fundación CYD, un 30% de los jóvenes tiene una visión negativa de la Universidad y acude a pocas asignaturas.
Esta desvinculación al entorno universitario se traduce cuando alcanzan sus primeros empleos. El ambiente laboral, la oficina o el lugar de trabajo son cada vez menos valorados por los jóvenes, especialmente tras la pandemia. Este factor socializador, según Andreu, es fundamental para incorporar el propósito corporativo en una empresa, y permite conservar a largo plazo a los trabajadores. Sin embargo, la "generación Z" valora menos el tiempo en el trabajo, y busca mucho más la flexibilidad laboral.
De hecho, y según un informe elaborado por Steelcase, la multinacional dedicada a la transformación de espacios empresariales, asegura que la "generación Z" busca cinco principales puntos: seguir aprendiendo, un salario digno, un equilibrio entre la vida personal y laboral, la sostenibilidad y un espacio de trabajo asignado y fijo. Muchos de los trabajadores más precoces, si bien se guían por el salario, no es su única prioridad. La conciliación con la vida personal es fundamental para los jóvenes, y, según un estudio del banco Santander, que preguntaba a jóvenes trabajadores, asegura que un 63% de los encuestados consideran que el trabajo es un "método para financiar mi vida".
Para las empresas, es crucial adaptarse a estas nuevas realidades, ya que para 2025 la "generación Z" supondrá un 25% de la mano de obra mundial, según el informe de Steelcase. No obstante, muchas compañías no están preparadas para este cambio, y únicamente un 24% de las empresas se sitúan en el rango de 15-30% de empleados de menos de 30 años, según un estudio de Adecco de empleo joven. De todas las encuestas que preguntaron, tan solo un 28% se encuentra implementando estrategiasa para afrontar el relevo generacional.
