Los precios vuelven a subir en Alemania. La tasa de inflación interanual en el país ha vuelto a registrar un incremento en el mes de agosto, situándose en el 7,9%, cuatro décimas más que en julio, según la primera estimación de los datos publicada este martes por Destatis, la oficina hermana de estadísticas. El aumento en el octavo mes del año representa una interrupción de la senda de moderación que el país había registrado durante dos meses consecutivos. La tasa del 7,9% es la más alta desde mayo, que a su vez fue la más alta de toda la serie histórica, iniciada en 1991 tras la reunificación del país, y la mayor suba de precios desde fines de 1973 en la antigua Alemania Federal. .
La tasa de inflación armonizada de Alemania en agosto se situó en el 8,8%, lo que supone una mejora de tres décimas respecto al séptimo mes del año. En agosto, los precios de la energía subieron un 35,6% respecto a un año antes, una décima menos que en julio, mientras que los precios de los alimentos subieron un 16,6%, casi dos puntos más que el incremento interanual del mes pasado.
En su análisis, Destatis ha destacado el efecto "sustancial" de los precios de la energía desde el inicio de la guerra, así como los problemas de suministro aún presentes como consecuencia de la pandemia. El despacho volvió a destacar el efecto sobre la tasa de inflación de las medidas introducidas por el Gobierno, como la rebaja del precio del transporte público y el descuento por llenar el depósito de combustible, aunque advierte que "todavía no se puede demostrar" hasta cuánto impacto tenían. Igualmente, La Oficina Federal de Estadística publicará los datos definitivos de la inflación para agosto el próximo día 13.
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