La energía eléctrica es muy importante para muchas de las actividades que llevamos a cabo a diario, lo que hace que, ante la subida del precio de la electricidad, la factura de la luz pueda llegar a dispararse. Esta situación hace que sea necesario adoptar pequeños cambios en la rutina diaria que pueden marcar una gran diferencia en el ahorro energético.
Aprovecha la luz solar
Apostar por el ahorro energético en el hogar puede ser mucho más sencillo de lo que en un principio puedas pensar, ya que hay una serie de hábitos diarios que puedes implementar con facilidad y sin esfuerzo alguno. El más obvio de todos es que trates de aprovechar la luz solar todo lo posible, puesto que de esta forma podrás gastar menos electricidad sin hacer prácticamente nada. Abre las cortinas y persianas durante el día para disfrutar de una iluminación natural.
Una vez que llegue la noche, no te quedará más remedio que utilizar las lámparas, en las cuales deberás utilizar bombillas de bajo consumo, ya que estas son una gran fuente de ahorro frente a otros tipos como las incandescentes o tradicionales. De igual forma, recuerda apagar la luz de aquellas estancias del hogar en las que no te encuentres, evitando así un gasto energético innecesario.
Uso eficiente de los electrodomésticos
Por otro lado, es importante hacer un uso adecuado y eficiente de los electrodomésticos, que son los responsables de gran parte del consumo energético en el hogar. Para evitar que se conviertan en un problema, es preferible optar por usar los programas de ahorro energético que incorporan estos aparatos, además de regular la temperatura del frigorífico o usar las sartenes y ollas con la medida apropiada para cada fuego y evitando el desperdicio de calor.
Aisla tu hogar
En lo que respecta a los sistemas de climatización o calefacción, conviene utilizarlos en un hogar que se encuentre bien aislado, ya que este puede marcar la diferencia en la eficiencia energética. Para ello hay que asegurarse que tanto puertas como ventanas están bien selladas y no se producen fugas de aire. De igual modo, conviene ajustar la temperatura y el tiempo que se utilizan estos sistemas, para lo cual será de gran ayuda utilizar ropa acorde a la estación en la que nos encontremos.
Baja la temperatura del calentador de agua
También hay que prestar atención al calentamiento del agua caliente, que puede ser una fuente significativa de consumo de energía en el hogar. Por este motivo, se aconseja bajar la temperatura del calentador de agua para reducir su consumo de energía, además de que aislar el calentador y las tuberías de agua caliente favorece que se reduzca la pérdida de calor y se pueda disfrutar de un mayor ahorro de energía.
Desconecta los aparatos que no estés utilizando
Por último, pero no por ello menos importante, debes incluir como hábito diario el desconectar los aparatos que no estás utilizando, ya que dejar continuamente enchufados aparatos como el ordenador, la televisión o el microondas, entre muchos otros, pueden incrementar hasta en un 10% el gasto anual del hogar. A pesar de que tengan un modo stand-by, es preferible desconectarlos para evitar ese consumo energético residual.
Todos estos consejos te ayudarán a hacer una gran diferencia en el ahorro energético de tu vivienda.
