La economía de la Eurozona avanzó un 0,1% entre enero y marzo en relación al trimestre previo, resistiendo el embate de las turbulencias financieras (con la quiebra del Silicon Valley Bank estadounidense y la crisis de Credit Suisse) y el fuerte encarecimiento de los costes de financiación que ha traído consigo el aumento de los tipos de interés. El PIB de los veinte socios que comparten el euro, con la incorporación ya de los datos de Croacia, venía de estancarse en el último trimestre del año anterior y existía el temor a que pudiera contraerse en el arranque de este ejercicio, algo que de momento, la región ha evitado.
El avance que hoy ha publicado Eurostat, la oficina de estadísticas europea, apunta a que el conjunto de la Unión Europea (UE) avanzó un 0,3% en el primer trimestre, esquivando así el riesgo de recesión técnica, puesto que entre octubre y diciembre el PIB de los Veintisiete se contrajo un 0,1%. En comparación con el primer trimestre de 2022, cuando las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania no se habían manifestado aún por completo, el PIB de la eurozona y de la UE registran un incremento del 1,3% en ambos casos.
Entre los países cuyos datos estaban disponibles, el mayor crecimiento del PIB en el primer trimestre del año correspondió a Portugal (+1,6%), seguido de España, Italia y Letonia (todos +0,5%). Por contra, se registraron descensos en Irlanda (-2,7%), así como en Austria (-0,3%). En términos interanuales, las tasas de crecimiento fueron positivas para todos los países excepto para Alemania (-0,1%) con España (+3,8%) como la economía con mejor evolución respecto del primer trimestre de 2022.
El PIB de Alemania, motor económico de la UE, se mantuvo estable con una tasa trimestral del 0% que contrasta con la contracción del 0,4% observada en el último trimestre de 2022. Por el lado negativo, Irlanda -que por su fiscalidad más ventajosa para las grandes empresas ha venido mostrándose más dinámica en trimestres anteriores- sufrió una contracción del 2,7%.
Reunión informal con las nuevas reglas fiscales sobre la mesa
Con todo, Eurostat hace hincapié en que estas estimaciones preliminares del PIB están basadas en fuentes "incompletas" (hay datos de apenas una decena de Estados miembros) y están "sujetas a nuevas revisiones". La publicación de estos datos coincide con la reunión informal de ministros de Economía y Finanzas de la UE en Estocolmo (Suecia), en la que los Veintisiete debatirán sobre el estado de sus economías de forma general y, en particular, de cómo ha superado el sector bancario europeo las recientes turbulencias tanto en Estados Unidos como en Europa.
Aunque no está en la agenda de las reuniones en Suecia, también abordarán la propuesta legislativa que la Comisión Europea puso encima de la mesa esta misma semana para reformar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento con el objetivo de conseguir una reducción gradual de los ratios de déficit y deuda pública, disparados a raíz de la pandemia, pero poniendo mayor énfasis en las inversiones destinadas a impulsar el crecimiento.
La Comisión Europea exigirá a los países más endeudados reducciones constantes de sus ratios de déficit y deuda públicos y prevé multas cada seis meses, que serán acumulables para aquellos que incumplan la senda de ajuste pactada con Bruselas. La propuesta presentada el miércoles por el Ejecutivo comunitario, prevé dar más flexibilidad a los Estados miembros para diseñar el ritmo de recorte de su pasivo público ya que cada gobierno acordará con Bruselas un plan fiscal a cuatro años, ampliables a siete bajo ciertas condiciones.
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