Holded sube la apuesta por el mercado español tras su venta al gigante Visma

Han pasado poco más de siete meses desde que el gigante Visma, compañía noruega de software, decidió poner sobre la mesa más de 120 millones de euros para hacerse con la startup española de software ERP (planificación de recursos empresariales), Holded. Una compra que llegó en medio del año récord de inversión tanto en rondas de financiación como en adquisiciones de startups como la de Glovo o Social Point. Ahora la compañía fundada por Javi Fondevilla y Bernat Ripoll está completamente enfocada en su negocio nacional y apuesta por mejorar su soporte para 'partners'.

"La idea es mejorar nuestro producto que busca dar soporte a los ‘players’ intermedios como cualquier consultora o empresa de digitalización. De esta manera ellos cuentan con Holded para ayudar a sus clientes”, indica el Co-CEO de la startup, Bernat Ripoll. Desde la compra de Visma, decidieron centrarse no solo en su producto clásico, que es el software final para el cliente, sino que ahora tienen dentro de sus indicadores claves de rendimiento apoyar a estos partners para poder ampliar su negocio.

Visma realizó esta operación por el monto indicado, pero además contempla otras decenas de millones en 'earn out'; es decir, dinero que cobraría Holded al cumplir ciertos objetivos vinculados al crecimiento de la compañía. Al respecto, Ripoll comenta que aún les "quedan unos años para estar en la compañía" y especifica que la noruega toma el control a nivel legal, pero que ellos buscaban un incentivo que tuviera sentido: "Ellos nos dan el plan de incentivos (earn out) y nos dan libertad para tomar decisiones. Aún tenemos igual o más control".

Holded fue adquirida por Visma por más de 120 millones. Previo a esta operación la startup había levantado más de 22 millones en rondas de financiación. 

Ripoll ha comentado que a nivel financiero estar bajo el mando de Visma ha significado un gran 'cambio de fichas'. La compañía antiguamente llegó a levantar más de 26 millones de dólares (22 millones de euros) en ampliaciones de capital de fondos tanto internacionales, como el francés Elaia, o nacionales como Nauta Capital. La última que realizaron fue seis meses antes de la 'megacompra', cuando entró el inversor francés, donde captaron 15 millones de euros. Sin embargo, no alcanzaron a estar mucho tiempo en el sillón de Holded ya que la operación supuso la salida de todos sus accionistas.

La historia y números

La compañía nació hace poco más de cinco años. Javi Fondevilla y Bernat Ripoll no se conocían en persona y su primer contacto fue a través de Facebook. Ripoll había creado una plataforma para ayudar a gestionar su propia facturación, lo publicó en la red social de Mark Zuckerberg, y Fondevilla, que tenía una empresa de retail, le escribió que le interesaba su proyecto. Desde allí comenzaron el camino de Holded: "Dejamos nuestros proyectos anteriores de lado, montamos la primera versión y conseguimos nuestra ronda 'semilla' de 250.000 euros; así fue creciendo", comenta.

En 2019 la compañía ingresó poco más de 1,4 millones de euros según el Registro Mercantil. Al año siguiente y en medio de la pandemia del coronavirus, ingresaron 2,9 millones de euros de acuerdo a la misma fuente. A pesar de ello, Fondevilla indicó que sus ingresos anualizados en aquel ejercicio fueron de más de 4 millones de dólares, casi 3,40 millones de euros. Este año pretenden seguir duplicando sus números con su modelo SaaS (software as a service).

Holded cuenta con más de 120 personas en su plantilla y tienen como meta para 2024/2025 contratar a unas 300 personas con el objetivo de multiplicar personal en los próximos años. Para Ripoll y Fondevilla la venta significó más que sólo números encima de la mesa. La compra les permitió centrarse en su producto y fórmulas: “Esta era la única manera de concentrarnos en lo nuestro y así nos asegurarnos de que Visma siga inyectando dinero cuando lo necesitamos", asegura Ripoll. Aunque por ahora el mercado español es su norte, no descartan que en un futuro puedan desembarcar en otros países.