El Corte Inglés vive una situación más extraña que la mayoría de las empresas en nuestro país desde que se decretara el estado de alarma hace dos semanas: por un lado, sus espacios dedicados a la moda, la electrónica o los juguetes cerraron incluso antes de que entrara en vigor el decreto, lo que ha derivado en un ERTE en el que la compañía complementará al 100% los salarios por la excepcionalidad de la situación; pero, por otro, sus supermercados continúan abiertos y, además, con tan buen rendimiento que están realizando esfuerzos continuos para garantizar el abastecimiento en tienda y, sobre todo, en un sobrecargado servicio online. Por eso, El Corte Inglés se ha sumado a la moda y ha empezado a recolocar temporalmente a parte de su plantilla para que ayude en la preparación de pedidos y la recogida en tienda.
Se une así a varios supermercados que llevan aplicando estas medidas desde el inicio de la crisis del coronavirus, como Alcampo o Carrefour. Se trata de reforzar las áreas que más se necesitan ahora mismo, es decir, el servicio online, el almacén y la reposición de artículos. Por eso, desde El Corte Inglés explican a 'La Información' que cada centro está reorganizando a su plantilla para "atender esta alta demanda puntual", por lo que se desconoce el número exacto de empleados que están siendo reubicados. Lo que sí explica la cadena es que "todos los que están en esta situación no entran dentro del ERTE planteado [...], ya que es personal con una tarea asignada y una labor" durante las semanas que permanezca vigente el estado de alerta en España.
Aunque la demanda creciente es generalizada en el sector, El Corte Inglés asegura que dónde más refuerzo se necesita estos días es en el servicio online, tanto para preparar pedidos como para entregarlos en el servicio de recogida en el párking. "La parte online y la parte de 'pick up' [recogida en tienda] se han multiplicado por seis", explica la cadena, un porcentaje muy por encima de los últimos datos recogidos por Kantar, que en la semana previa a la declaración del estado de alarma cifraba el crecimiento del canal online en un 138%.
El dato no es baladí: la curva en el uso del canal online en los grandes supermercados se ha pronunciado sobremanera en las últimas semanas, obligando a las empresas a adaptarse en tiempo récord ante un mercado totalmente inexplorado. Para El Corte Inglés, por ejemplo, se trata de un acelerón importante en su proceso de transformación digital y paso a la venta omnicanal: según las cuentas de 2018 (las últimas presentadas), el negocio online incrementaba un 17,4% en número de pedidos, un 19,7% en facturación y un 16% en tráfico a la página web; a la espera de conocer el crecimiento en 2019, para este año es previsible un aumento sin precedentes.
Los sindicatos aplauden el ERTE
De ahí que el trasvase de puestos hacia los supermercados se antoja tan necesario como positivo para reducir el impacto del ERTE en la plantilla. En este sentido, tanto El Corte Inglés como los principales sindicatos, Fasga y Fetico, consideran como la mejor opción posible la medida del despido temporal (de 14 días), así como el complemento para mantener el 100% de los salarios del personal afectado durante ese período.
El pasado miércoles, el Corte Inglés adoptaba esta medida "por causa de fuerza mayor y con el objetivo de mantener el empleo", tal y como explicaba la compañía, que apuntaba que serán 22.000 trabajadores los afectados por el ERTE, a los que teóricamente debería recuperar al 100% tras su cese temporal, incluso si caen las ventas o los beneficios durante ese tiempo.
El Corte Inglés se decidió cerrar todos sus centros comerciales el pasado 13 de marzo, justo antes de la declaración del estado de alarma. Desde entonces, el grupo ha mantenido abiertos los supermercados, pero el futuro inmediato del resto de trabajadores de la compañía, incluyendo Sfera y su agencia de viajes, estaba en el aire. Por eso, tal y como señala el grupo, el ERTE "se trata de una medida temporal que tendrá una duración de 14 días contados desde la fecha de publicación del Real Decreto, y su ampliación vendrá determinada por el tiempo que dure el actual estado de alarma implantado en nuestro país". Es decir, que a partir del 29 de marzo podría prorrogarse, al igual que el estado de alarma, cuya nueva fecha de finalización es el 11 de abril, tras la reciente aprobación por parte del Congreso.
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