Lo que era un interés por invertir en la compañía se podría convertir en una OPA. Los fondos internacionales de inversión KKR y Cinven sobrevuelan al operador Másmóvil y se preparan para lanzar una oferta pública de adquisición de la mayoría, con el objetivo de excluirla de la bolsa. La operación, adelantada este domingo por El Confidencial, valoraría la empresa en unos 3.000 millones de euros, lo que supondría una prima de en torno al 25%.
KKR y Cinven estarían también acompañados por otros fondos. Blackstone y Providence -este último es accionista, incluso después de que la compañía recomprara su bono convertible- también podrían estar presentes, aunque la lista de participantes no está cerrada. Fuentes oficiales de Másmóvil no han querido hacer ningún comentario.
El interés de los dos fondos de inversión llega antes de la crisis de la pandemia del coronavirus. Según adelantaba Expansión, ambas firmas habían confirmado a la dirección de la compañía su interés por invertir de manera significativa en la cotizada española. Pero esto se trataría de un paso más, con el objetivo de tomar el control y, en último término, acabar excluyéndola del Ibex 35.
La tesis de inversión se basa en una infravaloración del cuarto operador que no ha sido inmune ni a la propia crisis de la Covid-19, ni tampoco al castigo que ha sufrido el sector de las telecomunicaciones en los mercados. Bien es cierto que el impacto ha sido menor que en otras compañías incumbentes como la propia Telefónica. Hoy, su capitalización bursátil roza los 2.400 millones de euros.
La compañía tiene cotizando más del 60% de sus acciones. El resto está en manos de diferentes accionistas, entre los que se encuentra el propio Providence (9,1%), junto con la familia Ybarra (13,2%), Mayoral (8,1%) y Blackrock y José Eulalio Poza, con algo más de un 5%. Recientemente aterrizó con un 3% el fondo Capital Research.
Durante los últimos años Másmóvil ha tenido posición compradora. Después de hacerse con Pepephone y Yoigo en el año 2016, lo que lo convirtió en el cuarto operador de las telecomunicaciones en España, ha completado algunas compras más. La más destacada, Lycamobile, aún no se ha cerrado, pues está a la espera de la 'luz verde' de las autoridades regulatorias.
Pese a esa posición compradora, en numerosas ocasiones se le ha señalado como una de las potenciales compras en caso de que se flexibilizara más la consolidación del sector por parte de las autoridades europeas. Hay que recordar que la pasada semana el Tribunal General de la Unión Europea sentenció en contra del veto de la venta de O2 por Telefónica a Hutchison en 2016, en una decisión que ha sido interpretada como el comienzo de una flexibilización de las fusiones y adquisiciones.
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