Bruselas amaga con dinamitar la fusión Iberia-British presionada por sus rivales

  • Air France-KLM y Lufthansa aprovechan los problemas accionariales del grupo británico para intensificar la presión sobre la Comisión Europea. 
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EFE

IAG, el grupo que aglutina entre otras a Iberia, British Airways y Vueling, ha conseguido una nueva prórroga de Bruselas frente al Brexit. En cambio, no es oro todo lo que reluce, y este aumento del plazo para adaptarse a los requerimientos accionariales de la Comisión Europea es un mazazo al grupo británico, que no consigue convencerles de la tan ansiada 'españolidad' que les permitiría sortear el Brexit sin ningún problema. Así lo confirman fuentes conocedoras de las negociaciones en la UE, que ponen el foco en las presiones de sus competidores, Air France-KLM y Lufthansa, contra su estructura accionarial y solo ven una salida: romper la fusión de Iberia y British Airways. 

Y es que la nacionalidad de su capital es el problema principal al que se enfrenta el grupo de compañías aéreas frente a un Brexit duro. La Comisión Europea, órgano encargado de este tema, señala que más de la mitad del capital debe estar en mano de empresas o particulares comunitarios para poder seguir volando dentro de la Unión Europea tras del 'divorcio' de Reino Unido. IAG se escuda en que ellos lo son al considerar que El Corte Inglés ejerce el control de Iberia, pese a que la realidad del capital del grupo es bien diferente.

Ese hecho ha sido utilizado por sus competidores principales, Air France-KLM y Lufthansa, para ejercer cada vez más presión sobre Bruselas y forzar, según las mismas fuentes, que el accionariado se adapte a lo que exige la norma. De hecho, y según destacan, el 'lobby' ejercido hasta ahora por sus rivales va en el sentido de tratar de deshacer la fusión entre Iberia y British Airways, lo que haría que la compañía tradicionalmente española pasase a un segundo plano y dejase de ser un adversario directo para los grandes gigantes europeos del sector.

Actualmente, el vencimiento del plazo para que las aerolíneas se adapten a la estructura accionarial que requiere la Comisión Europea termina en marzo 2020. En cambio, gracias a la citada prórroga, se extendería hasta octubre del próximo año, lo que le permitiría a la compañía salvar una vez más la campaña de verano y ejecutar los cambios necesarios en la nacionalidad de los propietarios de los títulos para no perder su licencia de vuelo dentro de la Unión Europea.

En este sentido, el Gobierno también está preocupado por una posible ruptura de Iberia del Grupo IAG para cumplir el requerimiento de la Comisión Europea. Así lo señalan altos funcionarios de la administración pública al confirmar que es un temor presente en el Ejecutivo, que podría dejar a la compañía que preside Luis Gallego como una mera compañía nacional. Una circunstancia que podría ser aprovechado por la competencia para destronarla de su predominio incontestable como transportista natural entre Europa y Latinoamérica. En este sentido, el propio Secretario de Estado de Transportes, Pedro Saura, señalaba hace unos meses que Iberia no iba a tener ningún problema en demostrar su españolidad, pero sin decir cómo iba a hacerlo. 

Pero, ¿quiere IAG salvar a Iberia? Hasta ahora los propietarios de la tradicional compañía española apenas han ejecutado movimientos para frenar el posible impacto del Brexit. El grupo se escuda continuamente en su "demostrada" españolidad y presume de un plan de contingencia que apenas ha comenzado a ejecutar. IAG daba el primer paso el pasado mes de febrero cuando fijaba un límite máximo de 'Acciones No UE' en el 47,5% del total de los títulos de la compañía. 

En cambio, se trataba de un paso a medias, ya que no consideraban como 'no comunitarios' a los británicos. Así, de producirse finalmente un Brexit duro, esta medida no tendría apenas calado, ya que ante el 'divorcio' definitivo, los ciudadanos de Reino Unido tampoco serían contabilizados como comunitarios. 

Gráfico accionariado IAG
 

A día de hoy, y según los datos de la CNMV, todos y cada uno de los accionistas más destacados del grupo de aerolíneas serían considerados extracomunitarios tras el Brexit. El mayor propietario de títulos sería Qatar Aiways Group, con un 21,4%M; seguido por el estadounidense Capital Group & Management Company, con un 10,01%, y su compatriota Europacific Growth Fund, con un 5,26%. 

Los problemas en bolsa

Sea cual sea la solución definitiva para Iberia, IAG lleva tiempo sufriendo en bolsa con las posibles consecuencias que se deriven de un Brexit duro. Desde que se llevó a cabo el referéndum de salida de Reino Unido de la Unión Europea en junio de 2016, la compañía ha perdido más de 5.000 millones de euros de capitalización. 

La firma siempre ha mantenido que no tendrá ningún problema para seguir operando de cara al 'divorcio'. "Los servicios seguirán operando con normalidad", confirmaba Antonio Vázquez, presidente del grupo, en la última junta general de accionistas. En cambio, los mercados no parecen estar convencidos. El peor desplome sufrido por la compañía se produjo justo después de conocerse el resultado del referéndum que ponía sobre la mesa la salida de Reino Unido de la UE.

Entre el 22 de junio de 2016, el día justo anterior a la consulta, y el 27 de ese mismo mes, los títulos de IAG en el Ibex 35 perdieron casi 2,5 euros, pasando de los 6,615 euros a apenas 4,118 euros, un desplome de casi el 40% y casi mil millones de capitalización. Desde entonces, las caídas han ido reduciéndose, pero con una sangría continua que ya se ha 'comido' más de 5.000 millones. 

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