'Tira y afloja' accionarial

El núcleo de Glovo se blinda por la toma de control ‘silenciosa’ de Delivery Hero

Equipo directivo, accionistas minoritarios y algunos fondos pactan una posición común para frenar ventas parciales en el mercado secundario que puedan dar lugar a un vuelco en el accionariado.

El consejero delegado y fundador de Glovo, Oscar Pierre
El consejero delegado y fundador de Glovo, Oscar Pierre.
Glovo

Vino para erigirse en uno de los socios industriales de referencia y se está convirtiendo en una alargada sombra para el equipo directivo y el núcleo duro de accionistas históricos de Glovo. Delivery Hero continúa con su estrategia de seguir ganando posiciones en la compañía de reparto española a través de compras selectivas en el mercado secundario a accionistas minoritarios. Ante el riesgo de que llegue a superar en los próximos meses la psicológica barrera del 50% del total, la cúpula de la compañía y algunos de los fondos más cercanos se han blindando. Todos ellos han firmando un acuerdo con el que pretenden bloquear cualquier venta que no sea acordada por todos ellos. De esta forma se cerraría la puerta a esa toma de control ‘silenciosa’ del gigante alemán.

La relación entre el equipo de Glovo y Delivery Hero ha estado marcada por un ‘tira y afloja’ continuo. Desde que la multinacional germana aterrizó en el accionariado a mediados del año 2018 ha mantenido una estrategia que tenía un único objetivo: ganar peso no sólo adquiriendo acciones nuevas en las diferentes rondas de financiación que se han ido firmando sino también en adquisiciones de títulos ya emitidos en manos de accionistas minoritarios y diferentes ‘business angels’. Entre enero y julio ha desembolsado más de 160 millones de euros en esta tarea, comprando a socios como Amrest, dueño de cadenas hosteleras como La Tagliatella. A estas transacciones ha ido sumando otras más pequeñas y continuadas en el tiempo. Y, según confirman diversas fuentes consultadas, ha contactado con otros accionistas para seguir sumando. 

En este contexto, el equipo fundador y directivo, liderado por Óscar Pierre, y algunos de los fondos y de socios particulares que han acompañado a la empresa prácticamente casi desde el principio han decidido unir sus fuerzas. ¿Cómo? A través de una suerte de acuerdo de sindicación, por el cual se dan un plazo determinado para no vender sin que sea aprobado por todo el grupo, según explican varias fuentes conocedoras de la situación a La Información. Algunas de ellas aseguran que el periodo fijado es de dos años. El objetivo último es tener unidad de acción y así evitar el goteo de ventas en el mercado secundario que se desató hace más de un año y que no sólo presiona a la baja la valoración sino que amenaza con dar mucho poder a Delivery Hero como accionista.

No hay que olvidar que la multinacional, que hoy cotiza a una valoración de más de 21.000 millones, no ha hecho más que ganar presencia de manera discreta en todo este tiempo. Ya hace un año había cierto malestar entre algunos de los accionistas de ese 'núcleo duro' ante estas compras en el mercado secundario. Ahora la situación es muy distinta. Ha pasado de tener un 13,3% a cerca del 30% totalmente diluido, es decir, si contar el paquete de 'stock options' destinado para el equipo fundador y parte de la plantilla de la compañía barcelonesa. Es decir, si se incluyen en la ecuación esas opciones, rondaría, según las mismas fuentes, el 40%, acercándose a la barrera del 50%. La mayoría de estas compraventas que se están firmando fijan una valoración superior a los 1.000 millones de euros. Este tipo de operaciones suelen tener descuentos más o menos significativos respecto al 'precio' fijado en la última ronda de financiación.

Hoy, según queda reflejado en el Registro Mercantil, en el consejo de Glovo hay diez puestos, entre los que está Óscar Pierre, como presidente y fundador, y luego hay representantes de los diferentes fondos: Seaya Ventures, socio español también de Cabify, Lakestar, Cathay o Mubadala, máximo accionista de la petrolera española Cepsa. Tras la compra del 7,5% que estaba en manos de Amrest, Delivery Hero sumaría un nuevo asiento más, que estaba ocupado por el dueño de La Tagliatella. En total tendría dos, aunque probablemente en caso de alcanzar un porcentaje específico tendría derecho a nombrar más y, por tanto, a tener el control 'de facto' de la empresa.

En plena consolidación

El contexto en el que se está dando este avance 'en la sombra' de los alemanes es muy peculiar. Primero porque está marcado por una segunda ola de consolidación del sector del reparto de comida a domicilio. En Estados Unidos ha habido varios movimientos -la compra de Postmates por parte de Uber o la de Grubhub por parte de Just Eat Takeaway por 6.500 millones de euros- al igual que también en Europa y Asia. Los bajos márgenes de esta industria, junto con la batalla comercial entre las plataformas para ganar clientes y restaurantes, han endurecido las condiciones del sector. En este terreno se enmarca la decisión de la propia Delivery Hero de quedarse con todo el negocio latinoamericano de la propia Glovo por 230 millones de euros después de años de intensas pérdidas.

El otro aspecto claro que está de fondo es el riesgo regulatorio. España es su mercado bandera y aquí la legislación que se prepara no le beneficiará precisamente a Glovo. Tal y como avanzó La Información, el segundo borrador plantea no sólo la laboralidad de los 'riders' sino que implica un incremento de costes de estructura importantes para las plataformas. Pero, junto a la nueva ley hay que sumar la posición del Tribunal Supremo, que en la sentencia del pasado mes de septiembre 'tumbaba' el modelo laboral de este tipo de compañías y aseguraba que los repartidores ejercían como falsos autónomos. Era un golpe directo porque marcaba el camino para las decenas de casos que tienen abiertos en los tribunales.

Números de 2019 y crecimiento

Glovo cerró el año 2019 disparando las pérdidas hasta los 189 millones de euros con unas ventas de 200 millones. Una parte de estos 'números rojos' procedieron de Latinoamérica, donde competía con gigantes como el propio Uber o su máximo accionista, que opera con la marca PedidosYa. El estallido del coronavirus obligó en una primera fase a aprobar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para una parte significativa de la plantilla. Sin embargo, el crecimiento de la actividad del 'delivery' no sólo en restaurantes sino también de comida fresca de supermercados ha mejorado las cifras en los últimos meses, según confirman las mismas fuentes.

Para tratar de aprovechar este crecimiento, la compañía anunció este jueves un servicio de entregas 'ultrarrápidas' de compras por debajo de los 40 minutos para todo tipo de productos, más allá de la comida a domicilio. Para ello invertirán 20 millones de euros durante el próximo año 2021 y tratarán de reforzar las alianzas con grandes cadenas de supermercados (hoy cuenta con una para Carrefour) y de 'retail' como Douglas, Clarel o El Corte Inglés, junto con la ampliación de sus almacenes propios de alimentación. Todo para tratar de diversificar y seguir creciendo. Mientras todo eso sucede, entre bambalinas los movimientos de los accionistas continúan con la alargada sombra de Delivery Hero más presente que nunca.

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