Renfe completa un nuevo hito en su plan de internacionalización y ya tiene fecha para que sus trenes hagan presencia en Francia. Lo hará con dos rutas que antiguamente operaba en colaboración con SNCF, la operadora estatal francesa que rompió la joint-venture montada por ambas partes para gestionar los trayectos entre ambos países.
La primera de estas dos rutas es la que unirá Barcelona y Lyon, que arrancará sus servicios de alta velocidad en solitario el próximo 13 de julio. La segunda comenzará sus operaciones comerciales el 28 de julio con trenes entre Marsella, Barcelona y Madrid, recuperando así las dos relaciones anteriormente establecidas. En total, ofertará 9.700 plazas semanales para viajar entre ambos países.
Estos servicios unirán Barcelona, Girona y Figueres Vilafant con Lyon y, por otra parte, Madrid, Zaragoza, Camp de Tarragona, Barcelona, Girona y Figueres Vilafant con Marsella, con varias paradas en territorio francés como Narbona, Montpellier, Nimes, Avignon o Aix-en-Provence.
La llegada de Renfe a Francia vendrá acompañada con una oferta promocional para darse a conocer en el país. Se podrá viajar entre Madrid y Marsella por 29 euros, entre Barcelona y Lyon por 19 euros y con precios especiales de 9 euros para aquellos trayectos que unirán las ciudades francesas. El presidente de la compañía, Raül Blanco, ha dado a conocer la fecha en la que se pondrán a la venta los billetes de estos nuevos servicios, que podrán adquirirse desde este miércoles 21 de junio.
"Francia es un mercado natural, una apuesta decidida. Nuestra voluntad de operar allí es permanente y convertirnos en operador de referencia", ha declarado Blanco, quien también ha calificado de "histórico" el día de hoy para Renfe y para todo el sector ferroviario nacional: "Ese viaje entre Barcelona y Lyon será la primera vez que un maquinista español entre en territorio francés" en un viaje comercial.
Próxima parada: París
El presidente de la compañía también ha desvelado el siguiente hito a cumplir, que pasa por llevar sus trenes hasta París antes de que tengan lugar los Juegos Olímpicos de 2024, que se celebrarán el próximo verano en la capital francesa. "Tenemos el sueño de llevar a los atletas españoles en un tren de Renfe", ha confesado, aunque admite que todavía faltan "algunos elementos" como el certificado de seguridad para operar en la línea de alta velocidad que va más al norte de Lyon.
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