Santander cerrará el año con pérdidas contables pero trabaja en el dividendo

Banco Santander cerrará el año con pérdidas contables. Así lo ha dado a entender el consejero delegado de la entidad financiera, José Antonio Álvarez, al entender que será difícil recuperar beneficios como para suplir la dotación del fondo de comercio que han llevado a cabo en el primer semestre  y que ha dado como resultado unas pérdidas de más de 10.000 millones de euros. Pese a ello, la entidad financiera que preside Ana Botín ya trabaja en la posibilidad de pagar dividendo a sus accionistas con la vista puesta en el fin de las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE) el próximo mes de enero. El banco cántabro ha devengado unos 400 millones de euros para retribuir a sus accionistas en efectivo con cargo a 2020 -hará scrib dividend para los de 2019-, "basado en nuestra perspectiva macro y en la aproximación de los reguladores", ha afirmado Álvarez. 

Las pérdidas históricas cosechadas durante el primer semestre lastrarán así los resultados anuales de la entidad, que por primera vez cerrará con números rojos a nivel contable. En cambio, y de acuerdo con las palabras de su segundo espada, el resultado recurrente será positivo, pues la generación de resultados se mantiene "intacta". Como ejemplo, Álvarez ha señalado que en el segundo trimestre se ha generado un beneficio subyacente de 2.000 millones de euros, cifra que esperan repetir de cara a próximos periodos. 

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"Contablemente, ahora estamos en -10.800 millones de euros. En los próximos trimestres no esperamos generar beneficios de ese monto, por lo tanto contablemente habrá pérdidas", ha argumentado finalmente ante la insistencia de las preguntas al respecto el consejero delegado. 

Santander plantea la posibilidad de llevar a cabo la retribución a sus accionistas pues, según ha explicado el consejero delegado, calcula el payout -porcentaje del beneficio que distribuyen a sus accionistas- sobre el sobre beneficio subyacente, no sobre el atribuido. Precisamente gracias a la "fortaleza de los resultados ordinarios", como el propio Álvarez ha señalado, se podrá repartir un 'scrip dividend' de 0,10 euros con cargo a los resultados de 2019, esquivando así las recomendaciones del supervisor. "Es un tema técnico, los accionistas podrán vender las acciones", ha señalado. 

En este sentido, Álvarez ha ido más allá y ha reconocido que espera que el Banco Central Europeo (BCE) haga una mayor discriminación entre entidades a la hora de recomendar que los bancos no distribuyan dividendos en efectivo, evitando el 'café para todos' actual que no gusta nada en el sector financiero nacional.  Al mismo tiempo, ha recordado que este sistema que ahora se alargará hasta enero supone un perjuicio para la cotización de las entidades en relación con otros sectores. "Los inversores hacen sus inversiones en funcion de los riesgos. Lo que ocurre es que nuestro coste de capital sube y nuestras cotizaciones bajan". 

Santander trabaja con un escenario de caída del PIB en España de alrededor del 10%. Esta previsión es próxima a la que realizó el FMI, pero varía por países. "Hay escenarios más pesimistas o más optimistas", señaló Álvarez. El segundo de Ana Botín El consejero delegado confía en que la actividad ordinaria del banco crecerá a ritmos como los actuales o superiores en la medida en que la economía vaya abriéndose "de forma razonable", para lo que no está contemplando una situación "normal" pero tampoco de vuelta a los confinamientos.