Así serán los discursos de Rajoy y Sánchez

Última llamada al bipartidismo. La historia de los debates del Estado de la Nación ha sido, hasta ahora, por parejas: Adolfo Suárez-Felipe González; Manuel Fraga y José María Aznar contra González; José Luis Rodríguez Zapatero frente a Aznar; Mariano Rajoy ante Zapatero; Alfredo Pérez Rubalcaba contra Rajoy y este martes Rajoy frente a Pedro Sánchez.

Pero la fuerte entrada de 'Podemos' en el panorama político nacional hace peligrar el bipartidismo. Con Pablo Iglesias y Albert Rivera esperando en el banquillo; el ascenso de 'Ciudadanos' en las últimas encuestas y el "cambio" que demanda la sociedad podría no pasar por renovar a los dos grandes partidos; sino apostar por un tiempo nuevo: Pactos para gobernar.

Coaliciones de al menos tres formaciones como señaló Metroscopia este domingo para la Comunidad de Madrid, también se podrían dar en el resto del mapa autonómico. Además, este año los ciudadanos tendrán al menos cuatro citas con las urnas en once meses.

Ante este panorama este martes y miércoles se celebra en el Congreso de los Diputados el Debate sobre el Estado de la Nación que enfrentará a Gobierno y oposición. El primer acto de precampaña electoral. Una situación inédita ya que podría ser el último enfrentamiento entre un presidente que gobierna con amplia mayoría y el estreno de Pedro Sánchez como jefe de la oposición con un partido sacudido por los 'líos' internos y en caída libre en las encuestas.

Un dato que ha llevado a la realidad a los diputados de los principales partidos ha sido el contenido en el último sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). La encuesta muestra que socialistas y populares no suman más del 50% en estimación de voto. Algo que preocupa a Sánchez y a Rajoy que entienden este debate no como uno más, sino como la prueba de fuego que pueda 'reflotar' a sus formaciones.

Recuperar la senda del crecimiento, el pacto en la lucha contra el terrorismo yihadista, crear empleo, apoyo a los autónomos, conseguir que España sea miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, estabilizar el sistema bancario, el cumplimiento de los objetivos de déficit público o la mejora del saldo de la balanza comercial son algunos de los éxitos de Rajoy y su Gobierno según los expertos consultados por este medio.

Lainformacion.com se ha puesto en contacto con un colaborador de Rajoy en Moncloa para explicarnos 'su encierro' durante todo el fin de semana, quién le prepara y cómo va a frontar el cara a cara con Sánchez.

Desde el minuto uno, Rajoy escogió este martes y miércoles como fecha para el debate tras conocer el anuncio de elecciones en Andalucía por parte de la presidenta de la Junta, Susana Díaz, nos comentan.

El presidente lleva todo el fin de semana encerrado en La Moncloa para ultimar los detalles sobre cómo serán sus intervenciones. Últimos retoques al discurso, énfasis en cómo lo dice y a quién se dirije. Preparado ante las embestidas de la oposición y capacidad para responder con rapidez, señalan.

El equipo de colaboradores sigue el guión del discurso del año pasado en cuanto a temas a exponer y, seguidamente preparan un DAFO (un informe completo sobre las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades) de los rivales, en el caso de este martes: Pedro Sánchez y el PSOE.

Los grandes apoyos de Rajoy, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y el sociólogo Pedro Arriola también ha acompañado al presidente este fin de semana para conocer y ayudar a trabajar las intervenciones. Los datos son extraídos de las fichas técnicas que le pasan los Ministerios y el grupo parlamentario.El discurso de Rajoy

Desde Moncloa apuntan que el discurso del presidente gira en torno a tres ejes:

Rajoy comenzará su discurso con las cifras que explican la mejoría económica en España. Algo que ha hecho hasta ahora Rajoy en todas sus intervenciones. "Cifras de afiliación a la Seguridad Social, creación de empleo, Sanidad y Educación pública, explicar que este gobierno no ha congelado las pensiones, las prestaciones por desempleo, etc", señalan. También habrá espacio para enumerar la previsiones económicas de 2015, "seguimos creciendo", apunta en sus últimos discursos.

Aquí destacará las dificultades ya superadas y, por supuesto, habrá amplio espacio para recordar la 'herencia recibida'. Como 'frase estrella', Rajoy podría dejar claro que "España ha dejado de ser un país en recesión y con la prima de riesgo por las nubes para ser el país con mayor tasa de crecimiento de las grandes economías europeas". Mensaje que ha repetido el presidente en sus últimas intervenciones y al último que se lo comentó fue al primer ministro francés, Manuel Valls con motivo de la cumbre socialista europea celebrada el pasado fin de semana en Madrid.

Rajoy continuará su discurso anunciando los paquetes de medidas que en casi cuatro años ha aprobado el Gobierno "y los que están por venir", destacan desde Moncloa.

Reconocen que el paquete de ayudas ha llegado tarde pero es en lo que más énfasis va a poner. Este lunes se daba a conocer que Rajoy presentará un gran paquete de medidas sociales y de empleo. Un colaborador del presidente afirma que el apoyo a las familias, a la maternidad y a los sectores más dañados por la crisis será una de las medidas importantes que el Gobierno pondrá en marcha. Todavía a la espera de presentarla. De esta manera, Rajoy también hará frente a los embistes de Sánchez señalando a esta Legislatura como el "Gobierno que más recortes sociales ha realizado".

Otro grueso de medidas llegan de Justicia. La reforma del Código Penal y la ya famosa 'prisión permanente revisable' que el Ejecutivo y el ministro Catalá se encargan de desmentir que no es lo mismo que la cadena perpetúa. Además de esta reforma también se encuentran la Ley de Enjuiciamiento Criminal, la Ley Orgánica del Poder Judicial, la de Jurisdicción Voluntaria, la Ley Hipotecaria y el Catastro Inmobiliario, del Registro Civil, del Estatuto de la Víctima y la ley de tasas judiciales, trabajo del predecesor de Catalá, Alberto Ruiz-Gallardón.

Finalmente y como tercer eje, Rajoy dedicará bastante tiempo a hablar sobre la fortaleza de las instituciones, sus medidas de transparencia en la Administración, más contundencia contra la corrupción (en la que podría disculparse de nuevo por los casos acontecidos en su partido a este respecto) y una defensa clara a la Constitución como garantía de estabilidad para España.

El presidente también tendrá palabras hacia una Cataluña unida y su mensaje ya conocido de "seguir trabajando juntos porque aún falta mucho por hacer".

Rajoy venderá su partido como ganador de las próximas generales porque "somos garantía de estabilidad frente a una izquierda desunida y enfrascada en luchas internas", suele comentar en sus discursos el presidente.

Su baza será admitir errores pero el mensaje claro del Gobierno serán sus medidas y probar a base de datos que España ha salido de la crisis. En Moncloa, los posibles embistes de la izquierda no preocupan ya que "llevan tiempo preocupados por líos internos". Algunas fuentes populares apuntan que Rajoy salvará la figura, algo desprestigiada, de Sánchez como líder porque lo consideran necesario a la hora de firmar pactos de Estado como el firmado en materia de terrorismo o el separatismo. El presidente se limitará a responder ante los ataques con contundencia pero no 'matará' (políticamente) a Sánchez.El discurso de Pedro Sánchez

Visto desde la oposición, el debate cambia de forma para atacar directamente a "un presidente que no escucha a los ciudadanos", que hace "recortes contra los más débiles" y "su discurso sobre Cataluña es gasolina para el independentismo". Son frases del jefe de la oposición, Pedro Sánchez.

El secretario general del PSOE lleva dos semana preparando su discurso con ayuda de los suyos, los más cercanos el expresidente Felipe González y el exsecretario general Alfredo Pérez Rubalcaba, con quien le vieron hace una semana en un bar madrileño hablando.

Pero también han sido su sombra y gran ayuda el secretario de Economía, Manuel de la Rocha; la secretaria de Empleo, Mari Luz Rodríguez; el número dos del PSOE, César Luena; la secretaria de Estudios y Programas, Meritxell Batet, o el portavoz parlamentario, Antonio Hernando, según apuntan fuentes socialistas.

Pocos temas se han filtrado estos días desde Ferraz. Sánchez harto de filtraciones ha preparado sus intervenciones en secreto y solo sus más allegados entre los que se encuentran asesores podrían conocer los ejes sobre los que versará su discurso.

Este medio se ha puesto en contacto con algunas fuentes que han asegurado que veremos a un Sánchez "agresivo" en sus críticas contra el Gobierno 'de la desigualdad'. Además, explicará su agenda para la recuperación justa que ha venido destacando este último mes en sus actos. La corrupción será un eje principal socialista con Bárcenas como ataque e insistirá en el modelo de estado federal para España.

Sánchez expondrá las medidas de transparencia que ha venido haciendo el partido desde su nombramiento, como publicar todos los sueldos y ocupaciones de los diputados y miembros de la Ejecutiva Federal en la página web de la formación; también señalará su ya famosa frase que "no le ha temblará el pulso en echar a los corruptos de su partido" como posible defensa en caso que Rajoy saque a pasear a Cháves y a Griñán.Que Sánchez se defienda en lugar de explicar sus medidas, el temor de los socialistas

Lo que temen algunos socialistas es que el discurso de Sánchez, lleno de medidas para la regeneración, se quede en mera defensa de la acusaciones de la derecha. El caso 'ERE', la salida de Tomás Gómez en Madrid por el posible 'caso Tranvía' y la creación de una gestora para reconducir el PSM, las dudas sobre su liderazgo y el poder de la presidenta de la Junta Susana Díaz, que mantengan el acta a Cháves y a Griñán... Sánchez tendrá que dar muchas explicaciones o evitar el juego del "y tú más" si no quiere que su partido salga perderor en esa contienda.

Lo más seguro no será Sánchez sino el portavoz del grupo parlamentario y su amigo, Antonio Hernando quien ejerza de 'azote de la oposición' dejando al líder socialista la exposición de medidas.

Si se cumplen las encuestas, el año que viene las cosas ya no serán iguales y este podría ser el último debate centrado en un cara a cara entre el presidente del Gobierno y el líder del principal partido de la oposición.

La última carta se verá en las generales después de un año convulso y cargado de elecciones: andaluzas en marzo, municipales y autonómicas en mayo, catalanas en septiembre y generales a finales de año.