El Gobierno da un nuevo revés a la Abadía del Valle de los Caídos al comunicar que no considera "veraz" el presupuesto que presentó de cara a recibir la subvención anual de 340.000 euros, la cual corresponde al ejercicio de 2018. A través de Patrimonio Nacional, organismo dependiente de vicepresidencia del Gobierno, el Gobierno ha informado a la Abadía Benedictina del Valle de los Caídos que debe presentar unas cuentas que sean "equilibradas", estén "fundamentadas".
Según ha dicho Patrimonio, ya había solicitado con anterioridad la presentación de un presupuesto de ingresos y gastos "equilibrado y fundamentado que pueda ser analizado económica y contablemente", concretamente, el pasado 21 de enero notificó de ello a la Abadía.
Por su parte, el prior del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, ha señalado que, por lo que él sabe, la gestión de las cuentas "está tramitándose todo por los cauces adecuados" y que se trata de una decisión de hace tiempo.
Según ha señalado el organismo público, el Consejo de Administración de Patrimonio Nacional acordó, en su reunión de 18 de septiembre, un análisis tanto para los ingresos y gastos de la Abadía (que incluyen los de la Hospedería y Escolanía gestionadas por aquella) como para los ingresos y gastos del propio Patrimonio Nacional en el Valle de los Caídos. De esta manera, el ente público seguía las indicaciones del Tribunal de Cuentas en su Informe de fiscalización de 22 de julio de 2016, y de acuerdo también con el plan de actuaciones para poner en práctica esas indicaciones sometido al CAPN en noviembre de 2017.
"Todo ello con la finalidad, señalada por el Tribunal de Cuentas y prevista en la propia normativa de la Fundación, de elaborar un presupuesto completo y veraz de la Fundación que integre los ingresos y gastos de Patrimonio Nacional y de la Abadía", ha añadido el organismo, dependiente de vicepresidencia del Gobierno.
Patrimonio Nacional, como patrono del monumento, dedica anualmente 31 trabajadores y recursos económicos al Valle de los Caídos, que suman un gasto valorado en el entorno de 1,8 millones de euros anuales. A su vez, recibe ingresos (casi en su totalidad en concepto de venta de entradas) por un importe cercano a 1,5 millones de euros. Por su parte, la Abadía Benedictina, beneficiaria de la Fundación, administra los ingresos y gastos de la propia Abadía y de la Hospedería y Escolanía, los cuales son gestionados con independencia.
Patrimonio Nacional aprobó, por acuerdo de su Consejo de Administración el pasado 20 de noviembre, la subvención de 340.000 euros a la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, transfiriéndose dicha cantidad a la cuenta corriente de la Fundación del Valle. Esa subvención está prevista en la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2018, al igual que en años anteriores. La Fundación transferirá esos fondos a la Abadía Benedictina del Valle de los Caídos, que es su beneficiaria, una vez ésta haya presentados las cuentas "veraces" que exige Patrimonio Nacional.
Una vez Patrimonio haya sometido a examen esas cuentas en el Consejo de Administración, aprobará definitivamente la transferencia a la Abadía. Patrimonio Nacional ha precisado que en los años anteriores, 2016 y 2017, las correspondientes transferencias se completaron igualmente una vez finalizado el año al que correspondían. La Fundación mientras tanto sigue asumiendo a través de Patrimonio Nacional el pago de diversos suministros a la Abadía, como la electricidad y el agua.
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