"Los padres serán la clave"

Las razones por las que Celaá decide no separar a los alumnos más pequeños

Unos podrán juntarse y otros no. Educación diseña una hoja de ruta asimétrica para los alumnos que vuelven a los colegios en septiembre.

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Las razones por las que Celaá decidió que los más pequeños se queden juntos.
Europa Press

La vuelta al 'cole' se acerca... La ministra de Educación, Isabel Celaá,  confirmó este jueves que el regreso a las aulas para los pequeños tendrá lugar en septiembre y, por lo general, de forma "presencial". Las medidas propuestas para el regreso a lo colegios han generado polémica debido a la asimetría según los grupos de edad que conforman el cuerpo estudiantil. El Ministerio establece que "en Educación Infantil y hasta el 4º curso de Educación Primaria se podrán establecer grupos estables de alumnado idealmente con un máximo de 15 alumnos/as (y hasta 20 si fuera necesario), que junto al tutor/a conformarían grupos de convivencia estable que pueden socializar y jugar entre sí". Pero, a partir de 5º de primaria, esto no será posible y se deberá garantizar una separación de al menos 1,5 metros entre todos los presentes. 'La Información' ha conversado con el microbiólogo Gabriel Reina, de la Universidad de Navarra, para analizar la pertinencia de estas diferencias. 

"Somos vasos comunicantes". El experto zanja el debate y asegura que la exposición es igual de importante entre todos los menores de 15 años. Reina sostiene que lo ideal para la vuelta al 'cole' sería poder mantener una distancia de seguridad en todo momento y reducir todavía más los grupos de trabajo: "20 personases un número muy alto para bloquear la transmisión". Los estudios que cita el microbiólogo concluyen que los menores se contagian por Covid tanto como los adultos y el peligro del contacto entre ellos es que "son la puerta de entrada del virus para todos los hogares". El científico entiende que ninguna medida será 100% efectiva, por lo que "la responsabilidad de los padres jugará un papel importante. Tienen que evitar a toda costa llevar a sus hijos a los centros si presentan cualquier tipo de sintomatología". 

La ministra de Educación e basa en las cifras que maneja el Ejecutivo para respaldar sus medidas. El borrador del documento 'Medidas de prevención, higiene y promoción de la salud frente a la Covid-19 para centros educativos en el curso 2020-2021' establece como principal argumento para el regreso a clases la baja presencia del virus entre los menores de edad: "En España, un 1,37% del total de casos corresponde a población de entre 0 y 19 años, una proporción muy baja con respecto al total de casos". Por esto, los resultados de los grupos de edad en ese informe se corresponden con la 'flexibilidad' que se quiere instaurar en las aulas: los más pequeños, que sí podrán jugar entre sí, registraron una prevalencia menor. El estudio calcula que solo el 2,2% de los niños que tienen entre 0 a 4 años ha estado en contacto con el virus; entre los menores de 5 a 9, el porcentaje asciende al 3%; en cuanto a los jóvenes de entre 10 y 14 años, la prevalencia es del un 3,9%; y en el grupo de 14 a 19 anos, del 3,8%.

¿Y los efectos en la salud? El documento de Educación también se refiere a la gravedad con la que el virus afecta a las distintas personas y refleja que en España, teniendo en cuenta los casos estimados a partir de la encuesta de seroprevalencia, requirieron ingreso hospitalario el 0,56% de los casos en el grupo de edad de 0-4 años; el 0,08% en los de 5-9 años; un 0,10% en los de 10-14 años y 0,21% en los de 14-19 años. El Ministerio resalta que estas cifras están muy por debajo de las encontradas en otros grupos de edad, y que los datos de ingresados en las UCI son todavía más bajos.

Los españoles fueron sometidos a una de las cuarentenas más severas de toda Europa y los niños estuvieron en el foco durante varias semanas por la hipótesis de que eran 'potentes' agentes  de transmisión. Educación señala en su documento, y en este punto coincide con el epidemiólogo Reina, que todavía existe "cierta incertidumbre hacia esto" porque "la mayor probabilidad de contagio entre los y las menores ocurre en sus hogares".  Ante estas interrogantes, Educación ha utilizado como apoyo para apuntalar la pertinencia de la vuelta a las clases ciertos estudios de China. Uno de los trabajos del gigante asiático demuestra que la tasa de ataque secundario fue de 4,7% en la infancia y del 17,1% en mayores de 20 años; y el riesgo estimado en otra investigación fue 4 veces mayor para los adultos mayores de 60 años que para los niños.

En esta línea, Educación apunta en su documento que "por el principio de precaución, muchos países adoptaron la medida del cierre de los centros educativos. Sin embargo, no está demostrado que el cierre de escuelas como medida restrictiva para el control de la epidemia sea más efectiva que otras como el cierre de empresas o el control de otro tipo de interacciones sociales". Celaá señala que los estudios de modelización indican que el parón de la actividad escolar puede ser significativamente efectivo para el control de infecciones cuando los brotes se deben a virus con baja transmisibilidad y las tasas de ataque son más altas en la infancia que en la población adulta. Esto sucede con las gripes estacionales, pero no con la Covid-19. 

Para demostrar esto, la cartera de Celaá volvió a recurrir a un 'ejemplo asiático': en Taiwán, según las investigaciones del Ministerio, la propagación de la Covid-19 se minimizó sin el cierre generalizado de escuelas. El microbiólogo Gabriel Reina está de acuerdo con esta información, pero advierte que será muy difícil lograr que los niños se comporten con responsabilidad tras el confinamiento y que estas afirmaciones no implican que los menores se contagien menos: "La exposición es igual, por lo que hay riesgos". 

Además, los funcionarios de Educación señalan en su documento las conclusiones de algunos autores que denuncian que el impacto negativo de la pausa de la formación de los menores supera "con creces" los posibles aportes de la limitación de la transmisión de la infección por las consecuencias psicológicas y de desarrollo social que está dejando la pandemia. 

Los planes

El Ministerio asegura que se limitarán los contactos manteniendo una distancia de 1,5 metros o conformando grupos estables de convivencia. Esta separación podrá ser reforzada con elementos como mamparas o paneles. En todo caso, las autoridades piden que se priorice en la medida de lo posible la utilización de los espacios al aire libre. La higiene de manos, la ventilación frecuente de los espacios, la limpieza del centro y una gestión adecuada ante la posible aparición de un caso serán igual de importantes. 

Celaá también recomienda que en cada centro educativo haya una persona responsable para los aspectos relacionados con la Covid-19 o un equipo dispuesto a activarse en caso de peligro. Además, Educación indica que "tanto para minimizar la presencia de personas de manera simultánea en algunos espacios y organizar los grupos puede ser necesaria una reorganización del horario o su flexibilización".

La lista de recomendaciones es extensa, pero para el experto Gabriel Reina no se debería menospreciar la capacidad de transmisión del virus que tienen los menores. En Europa- en países como Francia y Alemania- y Asia ya hay ejemplos de retrocesos en la 'desescalada educativa' por la detección de nuevos casos en las instalaciones. La OMS ya advirtió que ningún país es inmune a un rebrote. De nuevo, la precaución es la clave. 

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