Los consumidores amantes de los dulces están enfrentando un doble problema con las tormentas azotando al principal productor mundial de vainilla, un sabor muy querido para el helado, justo cuando los precios del cacao al alza afectan también al chocolate. La región clave de Madagascar para el cultivo de vainilla ha sido golpeada por el ciclón Gamane, cuyas lluvias y fuertes vientos han inundado los campos y arrancado las vainas de vainilla de sus enredaderas.
Georges Geeraerts, presidente del sindicato de exportadores de vainilla de esta isla del océano Índico, auguró que el reciente diluvio podría reducir a la mitad la cosecha de vainilla. "En un mal año, la producción es de alrededor de 1.500 toneladas en comparación con un rango de 2.000 a 2.500 toneladas", explicó Geeraerts en una entrevista telefónica Bloomberg. "Una estimación conservadora, antes de un análisis más detallado de la región de cultivo, significa que la producción para la cosecha actual podría ser tan baja como 1.000 toneladas".
El clima adverso está golpeando a África, con condiciones de sequía en el sur que están marchitando los cultivos y contribuyendo a una mayor inflación alimentaria, mientras que los productores de cacao de África Occidental han visto cómo los rendimientos de sus plantaciones se desploman debido a las intensas lluvias y enfermedades en los cultivos, lo que ha triplicado los precios hasta alcanzar los 10.000 dólares por tonelada.
Esta situación está obligando a los fabricantes de chocolate a subir los precios y reducir las porciones para los clientes. La buena noticia para los amantes del helado es que se espera que las restricciones en el suministro de vainilla no sean prolongadas, y su coste aún no se ha recuperado de un exceso de oferta reciente. "El impacto menor de este año traerá el equilibrio a partir de 2025. El mercado está liberalizado y el precio actual por kilogramo es de alrededor de 60 dólares, en comparación con 250 dólares hace dos años", aseguró Geeraerts.
La escalada del precio cacao se frena
Por su parte, el precio del cacao extendió esta semana su racha más larga de caídas hasta ahora este año, después de un rally récord que vio los precios más que duplicarse en cuestión de meses debido a las intensas preocupaciones sobre la oferta de este grano. Los futuros en Nueva York cayeron hasta un 3,9% el jueves, aunque volvieron a subir el viernes hasta los 9.800 dólares por tonelada. El número de contratos financieros continuó disminuyendo después de recortes recientes en las apuestas de gestores de fondos, que redujeron las posiciones abiertas al nivel más bajo desde 2020. Las perspectivas de mayores pagos para los agricultores están aumentando las esperanzas de un impulso en la oferta en África Occidental.
El principal productor de cacao, Costa de Marfil, aumentó los precios en origen en un 50% para los granos de la cosecha media, mientras que Ghana, el segundo, está considerando una medida similar, según informó Bloomberg el pasado miércoles. Se espera que el aumento de los ingresos agrícolas, en los dos mayores países productores de cacao, anime a los productores a entregar más granos e impulsar la inversión en sus plantaciones productoras de cacao.
El rápido ritmo de aumentos de precios en la segunda mitad de marzo —de 8.000 a 10.000 dólares por tonelada— sugiere que el impulso, más que un cambio fundamental fresco, fue el motor, según los analistas de Citigroup. Los próximos dos meses "podrían representar un punto de inflexión en el ciclo alcista del cacao". Un informe de JPMorgan Chase & Co, firmado por Tracey Allen, estimó que los precios del cacao disminuirán ligeramente a medio plazo, pero seguirán siendo históricamente altos y se moverán alrededor de la marca de los 6.000 dólares. En 2023, la cotización del cacao se movía en torno a los 2.500 dólares hasta verano, aunque luego escaló hacia los 4.000 a partir de octubre cuando comenzó la crisis.
