Su respuesta más rápida a la crisis generada por el coronavirus y la desescalada exprés de su economía, unidas al apoyo vía compra de deuda en el mercado secundario por parte del Banco Central Europeo (BCE), están dando un respiro notable a Grecia en los mercados financieros. Tanto es así, que su prima de riesgo, el sobrecoste que el país paga por emitir deuda en relación a Alemania, se sitúa ya casi diez puntos por debajo de la italiana. El riesgo país griego se ha reducido hasta los 182,9 puntos básicos, mientras que el transalpino cotiza en 191,9 puntos básicos.
En concreto, los inversores están exigiendo una rentabilidad del 1,57% por el bono italiano a 10 años, mientras que por la deuda de referencia griega el interés que piden es del 1,47%, que es el nivel más bajo desde el pasado 6 de marzo, cuando la crisis sanitaria empezaba a recrudecerse por todo el mundo y muy especialmente en Europa. De acuerdo con los últimos datos hechos públicos, el número de casos por coronavirus se sitúa en Grecia en 2.937, mientras que las muertes confirmadas por la enfermedad son 179, muy por debajo de los registros italianos o españoles.
Grecia transita ya desde hace semanas por la tercera fase de la desescalada económica y se prepara para afrontar la temporada turística, una actividad que aporta más de un 10% a su PIB del país. De hecho, nuestro vecino abrirá fronteras a los turistas internacionales el próximo 15 de junio. En concreto, autorizará la entrada de viajeros de 29 países, entre los que no están incluidos los españoles, pero que sí incluye a países como Alemania, Corea del Sur o China, origen de la pandemia de Covid-19.
En sus últimas previsiones económicas, la Comisión Europea contemplaba un retroceso del PIB griego del 9,7% este año, frente al 9,4% de contracción que Bruselas espera para España. Sin embargo, la recuperación griega sería más vigorosa el año que viene, de casi el 8% frente al 7% calculado para nuestro país. Estas perspectivas son mucho más pesimistas que las enviadas por el gobierno de Atenas a Bruselas en su Plan de Estabilidad y que barajan una caída de la riqueza del 4,7% este año y un acelerón del 5,1% ya el próximo ejercicio.
Un ejemplo de gestión de la Covid
Qué hace que el Gobierno del conservador Kyriakos Mitsotakis esté poniéndose como ejemplo a nivel internacional de la gestión de la pandemia. Grecia contó en un primero momento con algo más de plazo que vecinos del Mediterráneo como Italia o España, puesto que la Covid-19 empezó a afectar algo más tarde al país, pero al mismo tiempo fue más rápida y contundente en su respuesta a la crisis. El Ejecutivo decretó el cierre del país cuatro días después de producirse la primera muerte por coronavirus, mientras que Italia lo hizo 18 días después de la primera y España con 30 días de decalaje.
Una vez que el país detectó el primer caso, el pasado 26 de febrero, empezó a aprobar medidas que fue endureciendo enseguida, como el cierre de las escuelas, prohibir los desplazamientos que no fuesen al lugar de trabajo o para realizar compras necesarias y fijó además multas para quienes incumpliesen las medidas impuestas para atajar la enfermedad. El confinamiento total se anunció el pasado 23 de marzo. Por entonces, Grecia había detectado 695 contagiados y 17 fallecidos por la enfermedad y ya llevaba tiempo monitorizando todos los vuelos procedentes de China, entre otros países.
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