Durante todo el 2023, la conversación alrededor de Inteligencia artificial (IA) ha sido intensa, y no cabe duda de que se va a seguir hablando mucho de esta tecnología que está ya muy presente en trabajos, hogares y, cómo no, en el punto de mira de los inversores. El escaparate para invertir en vehículos financieros vinculados a la IA es cada día mayor y, como menciona Ben Laidler, estratega de mercados globales de la plataforma de inversión y trading eToro, en una entrevista con La Información, "sólo en Estados Unidos hay más de 30 ETF que invierten en valores de inteligencia artificial, con activos por valor de más de 9.000 millones de dólares”.
Los datos recientes son prometedores. Según PwC, la IA podría aportar 15.7 billones de dólares a la economía global para finales de esta década, y un informe reciente de Cognizant Impact sugiere que la IA podría incrementar la productividad de Estados Unidos entre un 1,7 % y un 3,5% durante los próximos 10 años.
Muchos inversores han llegado a esta tecnología atraídos por estas expectativas y las fuertes revalorizaciones, en muchos casos superiores al 30% en 2023. Sin embargo, hay que recordar que el 2022 fue un año complicado para este sector. Antes de invertir a través de acciones, fondos de inversión o fondos de inversión cotizados (ETFs) es esencial realizar una investigación exhaustiva, comprender y aceptar los riesgos y la volatilidad, y consultar con un asesor financiero cualificado.
Segmentos cruciales en el desarrollo de la IA
La evolución de la IA se nutre de múltiples segmentos, cada uno de los cuales juega un papel vital en su desarrollo. En este sentido, Frederike Bauer, de Xtrackers en la gestora DWS, sugiere una orientación hacia los ETFs que se centran más en los "productores de IA" en lugar de los "usuarios de IA", enfatizando la relevancia de sectores como tecnologías de la información y servicios de comunicación.
En declaraciones a 'La Información', Bauer apunta algunas claves: “La nueva generación de chatbots como ChatGPT, el reconocimiento de voz y el aprendizaje profundo serán difíciles de imaginar sin otras tecnologías como el big data y soluciones basadas en el cloud computing”.
Cómo elegir un ETF de IA adecuado
Generalmente, los ETFs de IA se dividen en dos categorías: temáticos y de índice. Los ETFs temáticos se centran específicamente en empresas que están directamente involucradas en la investigación, desarrollo o aplicación de la IA, lo que proporciona una oportunidad más especializada. En contraste, los ETFs de índice buscan replicar el rendimiento de un índice específico de IA, ofreciendo así una mayor diversificación y una exposición más amplia al mercado.
Al seleccionar un ETF de IA, es crucial ir más allá de identificar simplemente los sectores más prometedores, como el software o la robótica. Chris Gannatti, de WisdomTree, destaca la importancia de considerar factores como la geografía y la exposición a subsectores específicos. Por ejemplo, evaluar si las empresas chinas están incluidas en el ETF o si la estrategia tiene una alta exposición a la industria de semiconductores puede ser fundamental.
Por lo tanto, al elegir un ETF de IA, los inversores deben analizar al detalle la composición del fondo, considerando los sectores en los que invierte, su alineación con tendencias específicas de la industria, su capacidad para adaptarse a los cambios del mercado y su enfoque geográfico.
Algunos ETFs de IA para considerar en 2024
A continuación, se describen tres de los principales ETFs en este sector, junto con sus características y rendimientos.
- WisdomTree Artificial Intelligence: este ETF abarca una variedad de empresas, tanto de mercados desarrollados como emergentes en sectores clave de la IA como la robótica, la ciberseguridad y el análisis de datos. Según Morningstar, ha logrado una rentabilidad anualizada del 20,4% durante los últimos cinco años, con una volatilidad del 21% en el mismo periodo. Además, su coste de gestión es de los más competitivos en el 0,32%.
- Xtrackers Artificial Intelligence & Big Data: con una perspectiva global, este ETF invierte en empresas dedicadas a la IA y el big data. Destaca por su notable rentabilidad anualizada del 30% a lo largo de cinco años y una volatilidad del 22%. Su coste de gestión es del 0,40%, reflejando su enfoque en áreas de rápido crecimiento y desarrollo tecnológico.
- iShares MSCI Global Semiconductors: este ETF se centra en la industria de semiconductores, esenciales para la tecnología moderna, incluyendo ordenadores, smartphones y vehículos autónomos. Registra una rentabilidad anualizada de 18% en los últimos cinco años y una volatilidad del 24%. Su coste de gestión es del 0,45%, ofreciendo una inversión estratégica en un componente crucial de la IA.
Fondos de IA seleccionados por Morningstar
Después de analizar los ETFs de IA, es importante considerar también las opciones de fondos de inversión específicos en este sector. Fernando Luque, editor jefe de Morningstar, recomienda para La Información varios fondos que podrían ser atractivos para los inversores interesados en la IA.
- Allianz Global Artificial Intelligence: este fondo resalta por su impresionante rentabilidad anualizada del 26,8% a lo largo de cinco años, y una volatilidad del 20,8% en el mismo periodo. Su coste de gestión se sitúa en el 1,35%, ofreciendo una inversión atractiva en empresas globales que lideran en IA.
- DWS Invest Artificial Intelligence. Este fondo se distingue por su enfoque global en empresas que están en la vanguardia de la investigación, desarrollo y aplicación de la IA, proporcionando una oportunidad diversificada y dinámica para los inversores.
- Echiquier Artificial Intelligence: con una estrategia similar, este fondo se enfoca en compañías a nivel mundial involucradas en la IA, y ha logrado una rentabilidad anualizada del 28,1% en cinco años. Con una volatilidad del 21,5% y un coste de gestión del 1,75%, representa otra opción sólida para la inversión en IA.
