Concentración bursátil

¿Sostenible o vulnerable? Siete valores con poder de mover índices en Wall Street

La concentración de todo el peso de los índices en un puñado de valores expone a los inversores de gestión pasiva y las bolsas en general a grandes movimientos como ha sucedido esta semana con Nvidia.

Wall Street
Wall Street
EFE

Wall Street lleva un año cuajando una remontada después de un 2022 aciago en el que se confirmó el primer mercado bajista desde la pandemia en 2020. El S&P 500, índice de referencia de la bolsa estadounidense, ha escalado cerca del 10% desde el primer día de cotización de enero de este año. El selectivo ha cuajado una recuperación que lo sitúa al borde de dar carpetazo a la tendencia bajista iniciada desde los máximos históricos.

Las dudas entre los traders se están haciendo notar, gestándose un debate más propio del mundo futbolístico o de la política. En este caso, entre alcistas y bajistas. El renacimiento del mercado norteamericano es para algunos el síntoma de que se ha iniciado un nuevo ciclo al alza, mientras que otros mantienen la prudencia ante la posibilidad de que la subida de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed), que ha sido la más acelerada desde la década de los 80, se termine por trasladar a la economía real y a la bolsa.

Pero siempre que se producen rebotes desde los mínimos, como ahora desde los 3.500 puntos que tocó el S&P 500 en el mes de octubre del 2022, cabe sacar la lupa del cajón para atender qué es lo que está detrás de ese movimiento. Es decir, cuáles son los valores que están acompañando a la subida del mercado en términos generales. Si lo hacen pocas acciones, el mercado se expone a tener más pasos en falso.

JP Morgan alertaba recientemente a sus clientes institucionales a este respecto que la amplitud del mercado es “la más débil de la historia” según algunas medidas. El estratega jefe de renta variable estadounidense de la firma, Dubravko Lakos-Bujas, señalaba que esto podría apuntar a un potencial “bajista para el mercado en el medio plazo”.

Actualmente, únicamente son siete compañías las que están sujetando el rendimiento positivo del S&P 500. Sin ir más lejos Apple y Microsoft representan por sí solas cerca del 14,5% del valor del selectivo. A ellas hay que sumarles Meta Platforms y Nvidia cuyas acciones casi se han duplicado en lo que va de año, mientras que Alphabet, Amazon y Tesla han subido más de un 25%.

Sin embargo, de los 500 títulos que cotizan dentro del selectivo de referencia de Wall Street, 341 han tenido un tenido un rendimiento por debajo del S&P 500. “El mercado está sustentado por esas grandes capitalizaciones y es verdad que es algo que no veíamos desde el año 2020, 2007 y 1999”, explica el estratega jefe de renta variable de CFRA Research. “Cuando hay una baja amplitud en el mercado se corre el riesgo de que la volatilidad se puede disparar en cualquier dirección y eso dificulta la tarea de análisis”, agrega Stovall a 'La Información' sobre esta situación.

El recuerdo de las puntocom

En la previa del estallido de la burbuja de las puntocom, únicamente 22 valores fueron capaces de batir al S&P 500 en porcentaje de doble y ahora ese porcentaje se ha estrechado a una docena de nombres. “Es cierto que los hedge funds y los inversores institucionales, que tienen grandes posiciones de liquidez, están acudiendo a la renta fija, pero también a la tecnología dentro de la renta variable, como una especie de refugio en este contexto de alta inflación”, concreta Stovall.

En 1999 el número de valores que consiguieron estar por encima del comportamiento del índice fue del 20%, justo el mismo porcentaje que estamos observando en 2023. Ni en la recuperación post pandemia, con el gran rally alimentado por las inyecciones directas de liquidez por parte de la administración de Donald Trump, se llegó a un porcentaje tan sumamente reducido.

“En la situación actual hay pocos precedentes y tiene dos lecturas en términos de mercados: si las empresas que están liderando el empuje alcista se ven frenadas, el selectivo tenderá a frenarse mucho; pero si el resto de valores comienza a acompañar al movimiento alcista, entonces el potencial será mucho mayor”, destacan en una reciente nota los analistas de Jefferies.

Por tanto, la concentración de ganancias en un número limitado de acciones plantea preocupaciones sobre la volatilidad y la dirección futura del mercado. El potencial de crecimiento del mercado dependerá, por tanto, de si los demás valores se unen al impulso alcista o si las empresas líderes se enfrentan a obstáculos derivados de la llegada de una recesión económica, lo que determinará la dirección futura del mercado.

Mostrar comentarios