Controla el 21,3%

Zegona reduce su poder en Euskaltel tras liquidar su alianza con Talomon Capital

José Miguel García, consejero delegado de Euskaltel.
José Miguel García, consejero delegado de Euskaltel.
L. I.

Punto final al contrato que unía a los fondos británicos que han dado un vuelco a Euskaltel en el último año. Zegona Communications, el mayor accionista de la operadora vasca, ha dado por finalizado el pacto parasocial que le ha unido a Talomon Capital desde enero de 2019 y que le permitía incrementar en un 1,4% adicional su poder de voto en la compañía. Gracias a este 'matrimonio de conveniencia', el fondo que codirigen Eamonn O'Hare y Robert Samuelson sobrepasó el peso accionarial de Kutxabank y pudo llevar adelante los cambios en la gestión que buscaba para dar un impulso a la teleco.

Zegona contrató a Talomon como accionista 'mercenario' para que le cediese el voto de sus acciones durante doce meses a cambio de una contraprestación que la firma británica declina en revelar a preguntas de ‘La Información’. Fuentes financieras sitúan por debajo del 5% del valor de la participación la comisión aplicada en función de si además se cedió o no el derecho al cobro de dividendos de Euskaltel. Desde la operadora evitaron también la cuestión debido a que se trata de un asunto entre “accionistas de la sociedad”.

Zegona

“Esta notificación se realiza voluntariamente, a pesar de que no se ha cruzado ningún umbral, para reflejar que las acciones de Euskaltel propiedad de Talomon Capital Limited ya no son atribuibles a Zegona dado el vencimiento del acuerdo de accionistas celebrado con Talomon Capital Limited el 14 de enero de 2019”, explica Zegona a la CNMV. De este modo, Zegona ha suplico el paquete de Talomon con la compra de acciones de Euskaltel por su cuenta. En la citada notificación, el fondo británico recuerda que “la expiración del acuerdo de accionistas no afecta las participaciones individuales de Zegona y Talomon” y que estas no cambian "después de la expiración del acuerdo de accionistas". 

Pérdidas millonarias de Zegona

Sin embargo, la notificación desvela que Zegona aumentó en un 0,3% su participación en Euskaltel en la segunda mitad de 2019, del 21% al 21,3% del capital de la operadora. De este modo, el fondo promedió a la baja el precio de adquisición de su inversión de 347 millones de euros en la empresa. Pese a que en diciembre entró en plusvalías latentes cuando Euskaltel se situó por encima de los 9,3 euros por acción, ahora que la cotización ha caído hasta 8,4 euros vuelve a perder dinero.

Durante el último año, Zegona ha comprado 11,3 millones de acciones de Euskaltel, el 6% de su capital, con una inversión que supera los 92 millones de euros. El fondo, cuyo único activo es la propia Euskaltel, ha logrado el respaldo de algunos de sus accionistas pese a la mala marcha de su inversión. El pasado diciembre incorporó a la gestora estadounidense Fidelity como su tercer mayor accionista por detrás de Marwyn y Artemis, que es accionista a la vez de forma directa en Euskaltel. Otros como Invesco o Legal & General acabaron tomando la puerta de salida y han reducido posiciones en el capital de Zegona.

La estrategia de Zegona de ‘buy-fix-sell’ se traduce en el objetivo final de vender la operadora vasca pese a la oposición de los accionistas fundadores del grupo como Kutxabank, que controla el 20% de las acciones. El tercer mayor socio es Corporación Financiera Alba, de la familia March, con un 11%, mientras que Abanca cuenta todavía con el 4,5% del capital. Sin embargo, la firma británica ha logrado hacerse con el control de la gestión e impulsó una reestructuración de la empresa.

Como parte de estos cambios, Zegona colocó al ex de Jazztel, José Miguel García, como primer ejecutivo de Euskaltel, que relevó a Francisco Arteche, mientras que Alberto García Erauzkin fue sustituido por Xabier Iturbe Otaegi como presidente. La semana pasada llegó el último de los nombramientos en el cúpula con la salida de Jon Ander de las Fuentes y el fichaje de Ángel Olabuenaga, proveniente de la eólica danesa Vestas.

Tras su debut en bolsa en julio de 2015, Euskaltel ha quedado relegada a un segundo plano de la escena de telecomunicaciones tras la compra de Jazztel por Orange, la fusión de Vodafone-Ono y el empuje de Másmóvil, que se ha convertido en el consolidador del sector tras las compras de Pepephone, Yoigo y su propio crecimiento orgánico.

Ha sido este último grupo, precisamente, el que desbancó a Zegona en sus planes por hacerse con una gran posición en el mercado español. Tras fracasar en la compra de Yoigo, la firma británica optó por fusionar a la  asturiana Telecable, de su propiedad al 100%, con Euskaltel en una operación valorada en 686 millones en 2017 que fue pagada en parte con acciones y supuso su entrada en el accionariado con el 15% del grupo.

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