Entrevista en '20 minutos'

David Sassoli: "Ningún país europeo cree que puede salir solo de esta crisis"

El presidente del Parlamento Europeo ha asegurado que "las consecuencias serán muy profundas y la UE tiene que estar a la altura. El objetivo es salir de la crisis con una Europa más fuerte.

David Sassoli, nuevo presidente del Parlamento Europeo
David Sassoli: "Ningún país europeo cree que puede salir solo de esta crisis".
EFE

La Unión Europea ha trabajado sin descanso. Esa es la idea que quiere transmitir David Sassoli cuando todavía no se ha dejado atrás la pandemia del coronavirus. El presidente del Parlamento Europeo ha concedido una entrevista a '20minutos' en una semana decisiva para el futuro de Europa y explica qué se puede esperar del Consejo Europeo de este fin de semana, donde se podría alcanzar ya un acuerdo sobre el reparto de los fondos de recuperación postcovid.

El político Europeo se dirige a España para asistir al homenaje de las víctimas de la Covid-19 y ha declarado que "la situación continúa siendo preocupante en muchos países. En el espacio europeo se siguen tomando medidas, y la responsabilidad sigue siendo de las instituciones, de los gobiernos y de las organizaciones internacionales. Creo que es bueno que se siga actuando con paciencia y con cautela".

Sobre el papel de las instituciones europeas en los distintos estados miembro, Sassoli ha defendido que "es verdad que a principios de marzo hubo mucho desconcierto porque no sabíamos lo que estaba viniendo y había incredulidad, pero a partir de las experiencias de países como Italia o Francia las cosas cambiaron y creo que la respuesta europea ha sido tempestiva. Se han tomado medidas inéditas a gran velocidad. Por ejemplo a nivel sanitario o con el mecanismo SURE. Pero tenemos que abordar también el futuro porque las consecuencias son muy profundas y la UE tiene que estar a la altura en el medio y en el largo plazo. El objetivo es salir de la crisis con una Europa más fuerte.

El presidente del hemiciclo europeo ha relatado que desde la UE "abrimos los edificios de las instituciones para el apoyo de personas vulnerables, especialmente mujeres. Miles de mujeres vulnerables, miles de mujeres solas. Hicimos esto tanto en Bruselas como en Luxemburgo y Estrasburgo. Creo que las instituciones europeas tienen que ser parte de la solución y es bueno que sean punto de encuentro de las personas más frágiles". Todo esto en el marco de la solidaridad que tanto ha defendido en sus comparecencias públicas. 

Y es que "si no hay solidaridad, no hay respuesta europea. Naturalmente estamos esperando a las respuestas de los gobiernos porque consideramos indispensable una respuesta común. Todos los países, los 27, necesitan de una respuesta común, aunque luego podamos entrar en la gobernanza del proceso. A diferencia del pasado y de la crisis que vivimos con Lehmann Brothers y Grecia, ahora ningún país piensa que puede salir solo de esta crisis. Esto es un paso adelante importantísimo que nos permite robustecer la Unión y la democracia. Solo lo podemos conseguir con un alto grado de solidaridad". 

La tensión entre los países del norte y del sur, y los chicos y los grandes ha sido palpable durante la crisis sanitaria. El líder europeo no has ha rechazado, pero explica que "el europeísmo no es una receta, es un campo. Un campo democrático. El debate es parte de la democracia y reconocer al otro es parte del debate. Hay pasiones, puntos de vista, sensibilidades, tradiciones. Del reconocimiento que nos demos dentro del espacio europeo llegará la respuesta a nuestros problemas". La próxima semana será decisiva. "Sobre la recuperación, tratándose de tantos recursos -la propuesta son 750.000 millones de euros-, deben concentrarse en políticas que hagan a la UE más fuerte. Por ejemplo, lo indicamos al inicio de la legislatura, el Green Deal. Además, la digitalización y la resiliencia. Estas son las tres líneas, útiles para que Europa siga fuerte", ha afirmado Sassoli. 

Para el mandatario europeo, la clave de la salida de la crisis estará en "Reforma e inversión. Reforma porque los países deben adaptarse y esto debe hacerse a través de inversiones, para el empleo juvenil, para la transformación de la industria europea y el mercado laboral". La UE se juega su futuro con sus próximos pasos, que el líder desmarca de las recetas empleadas durante la crisis anterior: "La crisis de 2008 hizo crecer al discurso nacionalista porque la respuesta europea fueron imposiciones a los países, y eso hizo crecer el mensaje soberanista. Hoy las medidas van en la dirección completamente opuesta. Ahora la respuesta es común y la deuda es común. El objetivo es tener una Unión más fuerte y más resiliente para el futuro, sobre todo a la hora de afrontar las dificultades. Se ha dado un cambio de paradigma".

Mostrar comentarios