A qué afecta la prórroga al límite del alquiler al 2% y hasta cuándo durará

En el último Consejo de Ministros de marzo, el Gobierno aprobó el paquete de medidas anticrisis, para paliar los efectos de la invasión en Ucrania que, entre otros, ha generado un aumento de los precios nunca visto, al menos, en casi las últimas cuatro décadas (a la vista está, de hecho, el dato del IPC adelantado de mayo que ha subido hasta el 8,7%). De ahí, que un grueso de la batería de propuestas fuera de carácter social, como un aumento del 15% de la cuantía del ingreso mínimo vital, el bono de 20 céntimos a la gasolina o, también, el límite del 2% al precio del alquiler. 

La idea, entonces, era que estas medidas estuvieran en vigor desde abril hasta el 30 de junio de 2022. Un total de tres meses. Llegado el plazo, el Gobierno valoraría si prorrogarlas nuevamente. Ahora, cuando quedan cuatro semanas para que se cumpla el tiempo establecido, desde Moncloa ya tienen sobre la mesa la extensión de, al menos, la rebaja de los carburantes y el límite al alquiler. 

Tal y como explicó la Ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez: "Si no hay cambios en las circunstancias, sobre todo en las medidas de carácter social, tiene lógica que el Gobierno las mantenga. Ante este escenario, el Gobierno prorrogará las medidas que sean necesarias para intentar amortiguar el efecto negativo de la crisis, entre ellas la limitación de alquileres".

Recordemos que el IGC es la cifra que tomó el Gobierno como referencia para limitar el encarecimiento al 2%, tasa que alcanzó en enero y que en los últimos meses se ha revalorizado hasta el 3,6%. Por tanto, aunque se debe tomar el último dato disponible, al ser un índice "topado", no subirá más del 2%, durante el tiempo que dure la medida. En caso de extenderse, se esperaría una prórroga de otros tres meses. 

A quién afecta 

Esta medida se aplica sin distinción sobre si el propietario de la vivienda es un gran tenedor (cuenta con más de 10 viviendas alquiladas) o es un particular. Esta es, de hecho, una de las grandes novedades que incluye este plan de choque y que amplia a todos los contratos algunas de las medidas que durante la pandemia se aplicaron a los alquileres entre inquilinos y grandes tenedores, como las moratorias o la renovación de los contratos.