Muchas empresas de casas prefabricadas apuestan por diseños más innovadores. Desde algunas menos convencionales, como las viviendas redondas, hasta otras construidas a partir de módulos que puedes acoplarse para agrandar el espacio disponible.
La empresa española HC3D ofrece este tipo de viviendas con un material poco habitual, y es que mediante impresoras 3D de gran tamaño construyen una casa prefabricada o industrializada en tiempo récord. Estas herramientas se desplazan hasta la localización final del solar y van depositando en el punto exacto una mezcla especial de hormigón certificado por la Universidad Politécnica de Valencia y creado por BEMORE3D y CEMEX.
Así, en apenas unos días, se fabrica la estructura principal de la casa en el lugar deseado y pudiendo personalizarse al detalle. Según informa la empresa, esto permite ahorrar hasta un 35% en los gastos asociados tanto a la construcción como el transporte o desplazamiento. Por otro lado, es completamente respetuosa con el medio ambiente ya que este tipo de proceso de construcción permite reducir un 75% la huella de carbono.
En menos de tres días
La compañía utiliza los mismos sistemas de cimentación que en las casas tradicionales, pero es en el proceso de construcción de la estructura cuando el método cambia. Mediante capas se va creando toda la vivienda con una precisión milimétrica respecto al diseño, por lo que el resultado final será exactamente igual que en los planos. Además, el material utilizado es incluso más resistente que las viviendas tradicionales y para reforzar se incluyen armado en los muros y otros elementos necesarios para el día a día como la climatización o sanitarios.
Desde su página web aseguran que todo el proceso puede realizarse entre 1 y 3 días, dependiendo del tamaño de la vivienda. Normalmente la estructura se finaliza en 24 horas y después optan por colocar el techo, encofrado o prefabricado, y otros elementos esenciales en la fachada. El interior se perfecciona con otros materiales como porcelánicos, pladur, escayola o pulido de hormigón.
Al ser completamente personalizables permiten crear viviendas del tamaño que desee el cliente. El precio final de este tipo de casa, llave en mano, es de 849 euros por metro cuadrado, por lo que una casa prefabricada de 50 metros cuadrados equivaldría a unos 42.450 euros. Sin embargo, se pueden solicitar muchos otros tamaños, una de 100 m² costaría 84.900 euros, mientras que una de 200 m² sería de 169.800 euros.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios