Moderan el impacto del euríbor

Casi 50.000 empleados de banca se pueden beneficiar de 'topes' a su hipoteca variable

Los representantes de los trabajadores del sector financiero piden topar el interés de los préstamos hasta octubre de 2024 en su nuevo convenio, una decisión, que han tomado ya algunas entidades para ayudar a sus empleados.

La presidenta del Banco Santander, Ana Botín
Casi 50.000 empleados de banca se pueden beneficiar ya del tope a sus hipotecas
Europa Press

La subida del euríbor, el índice al que se referencian la mayoría de las hipotecas a tipo variable, se ha disparado en los últimos 18 meses hasta superar la barrera del 4,1%. Es tal la pérdida de poder adquisitivo que ha supuesto su escalada por el encarecimiento de las cuotas hipotecarias que CCOO, UGT y Fine han incorporado en sus propuestas para el nuevo convenio de banca y ahorro, que estará vigente para los años 2024-2026, topar los préstamos hipotecarios de los empleados del sector financiero. No obstante se trata de una medida que las entidades han ido incorporando y lo que estarían buscando los representantes de los trabajadores es hacerla extensible a todos los empleados del sector financiero.

La propuesta sindical recoge limitar el tipo de interés aplicado a los créditos para adquirir una primera vivienda al 1%, una iniciativa que se aplicaría hasta octubre del próximo año, pero según los representantes de los trabajadores se dejaría la puerta abierta para que se prorrogara más allá de ese plazo. No  hay que olvidar, que el euríbor ha pasado de cotizar en febrero de 2022 en negativo a cerrar septiembre en el 4,15, lo que supone un encarecimiento de las hipotecas de hasta 225 euros al mes. 

Sin embargo, esta iniciativa no es nueva ya que, desde que arrancó la subida del euríbor, algunas entidades optaron por topar los préstamos para adquirir una vivienda de sus empleados. Por ejemplo, Abanca. La entidad limitó el tipo de interés de sus trabajadores, que cuenta con 6.000 trabajadores, al 1%, según fuentes sindicales, en línea con lo reclamado en la propuesta del nuevo convenio. 

Banco Santander, que a junio de 2023 contaba con 26.679 trabajadores en España, es otro de los bancos que estableció un tope de las hipotecas ligadas a euríbor para sus empleados ya a principios de año, del 1,5%, y, aunque todavía la decisión está dentro del período de vigencia, el banco ha decidido anticipar la revisión de cara al próximo año para seguir apoyando a su plantilla. Además, esta medida afectará tanto a financiaciones nuevas, como a la revisión de los préstamos existentes. 

Esta iniciativa también ha sido replicada por otras entidades del Ibex 35. Es el caso de Unicaja Banco (con 7.621 trabajadores), que según estas mismas fuentes sindicales, estableció un tope del 1,75%. En cuanto a las entidades que no cotizan dentro del selectivo español destacan Ibercaja, que estableció un límite del 1,57% para sus empleados,  que rondan los 4.700, a finales de año y Kutxabank,  cuya plantilla supera los 5.000 trabajadores, con el 1,97%. El hecho de que sean porcentajes tan diferentes ha hecho a los sindicatos incluir esta reclamación en sus negociaciones y que se aplique un criterio único. 

Paso de tipo variable a tipo fijo

BBVA, por su parte, llegó un acuerdo con los representantes de los trabajadores en junio de este año para cambiar las condiciones de los préstamos destinados a la adquisición de vivienda tanto nueva como de segunda mano facilitando el cambio de tipo variable a fijo por una oferta que mejora las ofrecidas a los clientes. Así, en el momento de lanzamiento de la medida, este tipo fijo bonificado se situó en el 2,20% para operaciones hasta 15 años y del 2,30% para operaciones desde 15 hasta 30 años. La entidad cuenta con 26.764 en España, pero la medida en concreto beneficiaría a 6.900 trabajadores de la entidad que tenían a junio de 2023 un préstamo con las condiciones para novarlo a tipo fijo.

Precisamente, los sindicatos creen que es factible que se extienda este acuerdo al resto de entidades financieras que aún no lo han adoptado porque en el caso de la entidad que preside Carlos Torres el pacto fue fruto de las negociaciones entre ambas partes, lo que demuestra la voluntad de las entidades de paliar los efectos de la subida de los tipos de interés, con la consiguiente pérdida de poder adquisitivo que suponen la subida de las cuotas, más allá del incremento de los salarios aprobada por el convenio.

En cambio, los sindicatos no tienen constancia que Caixabank haya adoptado un acuerdo en ese sentido, mientras que en el caso de Banco Sabadell los representantes de los trabajadores ya estarían en negociaciones para encaminar un pacto. Con todo, en el encuentro que mantendrán los sindicatos y las patronales, a finales de octubre con la banca y principios de noviembre para el sector del ahorro, se buscará definir las condiciones mínimas y topes tipo interés y arrancar un compromiso de negociación en cada empresa para mejorar dichos mínimos.

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