Según el CES

La inflación recorta un 4,3% la renta disponible de los hogares en plena crisis

El hecho de que las familias hayan contado con el ahorro que acumularon durante la pandemia ha servido de colchón, permitiendo que el consumo no se haya visto afectado de forma significativa

Antón Costas, presidente del Consejo Económico y Social (CES)
Antón Costas, presidente del Consejo Económico y Social (CES)
CES

La inflación se ha convertido en el principal quebradero de cabeza para las economías española y europea en medio de un contexto de incertidumbre económica por el 'shock' energético y las consecuencias de la guerra en Ucrania. La actual crisis ha lastrado la renta disponible de los hogares un 3,5% en euros corrientes y un 4,3% descontando la inflación, un tijeretazo superior al que se produjo durante la pasada crisis financiera -contabilizando desde el primer trimestre de 2021-. El hecho de que las familias hayan contado con el ahorro que acumularon durante la pandemia ha servido de colchón, permitiendo que el consumo no se haya visto afectado de forma significativa hasta la fecha. Eso es lo que permite que la economía siga tirando hasta la fecha.

Es el diagnóstico que hace el Consejo Económico y Social (CES), en su última 'Memoria sobre la situación socioeconómica y laboral de España', que ha presentado este martes el presidente del organismo, Antón Costas, junto a Raymond Torres, consejero y presidente de la Comisión de Trabajo que elabora este informe, en la antesala de la jornada 'Perspectivas de la Economía Española'. Torres ha recordado que, a diferencia de lo que sucede en EEUU, el problema de la inflación en Europa no es de demanda, y ha apuntado a que por el impacto de la inflación la economía española es un 4% más pobre, puesto que dispone de ese porcentaje menos de renta por el alza de los precios importada.

Pese a que todavía no se aprecian efectos de segunda ronda en la economía, sí preocupa la evolución de la inflación subyacente que, de acuerdo con el avance publicado el martes por el Instituto Nacional de Estadística, se situaría este mes en el 6,3% frente al 6,8% de la tasa general. El porcentaje de componentes del IPC que crecen por encima del umbral del 6% es muy importante, de hecho alcanzaría ya el 52%, según el consejero del CES. 

En el organismo consideran muy importante que las ayudas se focalicen a sectores en dificultad para que no explote malestar social (como ha sucedido, por ejemplo, en Francia, donde la sensibilidad respecto a la inflación es mayor). También apuestan por ayudar a las empresas para evitar que se produzca un desgarro de tejido productivo y una pérdida de oferta, así como por un pacto explícito o tácito de rentas.

"Probablemente hemos tocado techo en cuanto a la inflación", ha apuntado el también director de Coyuntura de Funcas, recordando que el precio de las materias primas no energéticas va retrocediendo (los de los metales, fertilizantes...), que los cuellos de botella se van suavizando en general y que eso se traslada de forma positiva a la inflación importada. "Por el lado de la subyacente va a depender de nosotros que la contengamos y evitemos efectos de segunda ronda", ha matizado.

El reparto justo de costes acorta las crisis

El presidente del CES, Antón Costas, ha puesto en valor cómo en el corto plazo y con un problema de coste de la vida como el actual, puede aplicarse "anestesia local", esto es, transferencias específicas a hogares concretos, como pudiera ser el bono alimentario. "Las políticas sociales bien diseñadas en momento determinado hacen que la economía funcione mejor", ha incidido en varios momentos de su intervención. Costas ha recordado que cuando existen reglas de reparto justas de los costes de la crisis, las recesiones son más cortas y la recuperación es mucho más rápida. Ha citado como ejemplo la aplicación de los ERTE y de otras medidas aprobadas en 2020 para hacer frente a las consecuencias de la pandemia, que acortaron la duración de esa crisis a tres trimestres en 2020, cuando la financiera se prolongó durante cinco años. 

No obstante, observan importantes puntos de resistencia de la economía española, como son el hecho de que el mercado laboral tiene un comportamiento muy distinto al de anteriores crisis, así como el hecho de que el sector exterior se haya visto afectado en otros periodos recesivos o de crisis y de momento esté aguantando bien. De cara al corto o medio plazo han apostado por mantener con medidas que han funcionado hasta la fecha como el tope del gas (que permite a España mantener una inflación por debajo de media de la zona euro).

Mostrar comentarios