Elecciones generales 23-J

El PSOE diseña una reforma fiscal más profunda para allanar un pacto con Sumar

Al abrirse a prorrogar y ajustar los gravámenes a banca y energéticas, a homogeneizar entre CCAA la imposición a la riqueza o fijar una tributación mínima en Sociedades buscan tender puentes con el partido de Yolanda Díaz

Nadia Calviño, Pedro Sánchez y María Jesús Montero en el acto de presentación del programa electoral del PSOE
Nadia Calviño, Pedro Sánchez y María Jesús Montero en el acto de presentación del programa electoral del PSOE
Agencia EFE

El PSOE ha puesto sobre la mesa una reforma fiscal más profunda para tratar de tender puentes con Sumar ya desde el mismo arranque de la campaña electoral del 23-J. Los socialistas incluyen en su programa, que el presidente Pedro Sánchez presentó este viernes en Madrid, medidas con las que intentarían avanzar en un eventual pacto de Gobierno con la formación liderada por Yolanda Díaz en caso de que ambos partidos lograsen alcanzar los escaños suficientes para 'repetir' en la Moncloa. Las encuestas dan como vencedor al PP de Núñez Feijóo, pero la izquierda ha logrado ir reduciendo distancias a medida que se han ido consolidando los acuerdos para formar gobierno a nivel autonómico entre los populares y Vox. 

El nuevo marco fiscal diseñado por los socialistas presenta diferencias de calado en relación al programa con el que concurrían a los comicios de 2019 y entra más en detalle en algunas de las medidas propuestas. Por aquel entonces, pese a imponerse en la cita del 28 de abril, Sánchez fue incapaz de formar un Ejecutivo, por el cerrojazo de Ciudadanos y ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con Unidas Podemos. El líder socialista se vio obligado a convocar a los electores a las urnas por segunda vez en apenas unos meses: el 10 de noviembre. Para evitar cualquier bloqueo que pueda recordar la situación vivida hace cuatro años, el PSOE mueve ficha en algunos puntos clave para la coalición que capitanea Díaz. 

En primer lugar, se abre a prorrogar y ajustar los gravámenes temporales sobre la banca y las energéticas -que en principio iban a estar vigentes hasta finales de 2024- "para que ambos sectores sigan contribuyendo a la justicia fiscal y al sostenimiento del Estado de bienestar". Era una de las principales demandas del actual socio de Gobierno. También recoge el guante en lo relativo al Impuesto Temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas, cuyos resultados evaluará para, en su caso, avanzar en el debate sobre la tributación de la riqueza en el marco del modelo de financiación autonómica "para acabar con la competencia fiscal desleal entre territorios", el conocido como 'dumping' a cuenta de las diferentes bonificaciones que las regiones han establecido en el impuesto de Patrimonio. 

La reforma del sistema de reparto, que caducó en 2014, ha sido una de las cuentas pendientes del Gobierno de coalición en la actual legislatura -se comprometió a abordarla de una vez por todas- junto con la propia reforma fiscal. Sumar va un paso más allá y apuesta por un impuesto a las grandes fortunas permanente y por reforzar su progresividad, de forma que pueda llegarse a tipos impositivos de al menos el 4% en el caso de los patrimonios más elevados. La formación se plantea reformar en profundidad el impuesto sobre Sociedades "para aumentar la contribución, en especial, de las grandes empresas" a las que gravaría con un tipo mínimo del 15%.

Los socialistas no hablan en el suyo de tipo mínimo concreto, pero sí que se decantan por establecer una "tributación mínima suficiente" aunque común para todo el ámbito europeo. En su programa el PSOE se compromete además a avanzar en la fiscalidad verde bajo la premisa de "quien contamina paga", que irá acompañada de medidas compensatorias, bien en la imposición directa o bien en las políticas de gasto, para incentivar los cambios necesarios entre las clases media y trabajadora. Su propuesta marca distancias con la tasa a las renovables que pretende poner en marcha Alberto Núñez-Feijóo si su partido logra el respaldo suficiente de los votantes el próximo día 23. En este mismo ámbito de actuación el PSOE se propone evaluar los incentivos vigentes para impulsar la eficiencia energética, la sostenibilidad medioambiental y la economía circular.

Más matices y diferencias en el Impuesto sobre la Renta

La aproximación entre los dos partidos de izquierdas también es evidente en lo que tiene que ver con el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (que es de lejos el tributo que más recauda, con unos ingresos de 109.405 millones el pasado ejercicio), aunque con matices importantes. Los socialistas apuntan a una mejora de los incentivos por hijo y por dependencia y cuidados, tanto en el IRPF como en las políticas de gasto. "Aumentaremos el mínimo por descendientes y personas dependientes en el IRPF con el fin de apoyar a las familias con hijos, impulsar la natalidad y acompañar en el cuidado de las personas mayores y dependientes", señalan en el documento de 272 páginas. 

Mientras, Sumar quiere ampliar el número de tramos a partir de 120.000 euros, aplicando tipos marginales crecientes: del 45% marginal actual se subirá por tramos hasta llegar al 52% para rentas superiores a los 300.000 euros. Y pretenden, además, seguir acercando los tipos de las rentas del ahorro a los de las rentas del trabajo. Este alza afectaría a rentas del capital a partir de 120.000 euros para llegar, al menos, hasta un tipo del 30%. La formación se decanta, igualmente, por evaluar y eliminar aquellas deducciones del IRPF que no tengan una justificación económica. 

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