A través de la IGAE

Hacienda dejar pasar los tres meses del rescate de Air Europa sin datos nuevos

El fondo que regula las ayudas de Sepi da un trimestre de plazo al Estado para que detalle los términos de cada operación. El acuerdo de salvación de la aerolínea fusionada con Iberia se adoptó el 3 de noviembre. 

Iberia Air Europa
Hacienda limita a los datos ya conocidos los detalles del rescate de Air Europa.
EFE

No hay más datos. El rescate de Air Europa sigue siendo una incógnita en muchos de sus puntos, sobre todo en lo que tiene que ver con el criterio de concesión de los 475 millones de euros que le fueron otorgados a través del fondo de rescate para empresas estratégicas de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Tras los tres meses que recoge la normativa de este instrumento para publicar información concreta sobre la operación, el Ministerio de Hacienda se ha limitado a comunicar a través de la IGAE (Intervención General de la Administración del Estado) los datos que se hicieron públicos el pasado 3 de noviembre, cuando el Consejo de Ministros dio luz verde a la ayuda. 

En el sector, según confirman a La Información varias fuentes, esperaban que durante este plazo el ministerio que capitanea María Jesús Montero pusiese sobre la mesa -a través de los datos que debe remitir a este organismo- algún detalle más de la operación. Nada más lejos de la realidad. Hacienda reseña en el portal del Sistema Nacional de Publicidad de Subvenciones y Ayudas Públicas que SEPI ha concedido dos préstamos, uno de 240 millones de euros y otro de 235 millones, a Air Europa Holding SL y que lo ha hecho a través del fondo de rescate. 

Estas cuantías, tal y como se señaló tras su concesión el pasado mes de noviembre, corresponden, en el primer caso, a un préstamo participativo, y en el segundo, a uno ordinario. Este troceo evita el control de Bruselas -que se establece para ayudas a partir de los 250 millones-, otro hecho que se resalta a la hora de denunciar la opacidad. Además, pese a haberse solicitado el informe de viabilidad por el que se concedió esta ayuda en reiteradas ocasiones, desde el Ministerio y sus empresas dependientes se ha evitado publicarlo aludiendo a cuestiones de "competencia". 

La norma que rige el fondo y que se publicó en el BOE el pasado mes de julio, señala en su artículo siete que "en un plazo máximo de tres meses desde la realización de la operación de recapitalización de la empresa, el Estado hará pública información relevante, como la identidad de la empresa, los importes nominales de ayuda concedida y sus términos". Es precisamente en esta última parte del articulado la que causa controversia en el caso de Air Europa.

El sector y parte de la oposición en el Congreso considera que los pormenores de la operación deben hacerse públicos

SEPI, por una parte, entiende que ha proporcionado toda la información necesaria que le exige la norma para esta operación, mientras en el sector, y sobre todo en medios políticos consideran que los "términos" de los que habla la norma no han sido desvelados, pues solo se conoce el tipo de préstamo y no se han revelado oficialmente otras variables. Todo al tiempo que ya se ha cumplido el plazo máximo de tres meses para llevar a cabo dichas revelaciones. 

Este movimiento es entendido como una opacidad manifiesta por parte de la oposición política que lleva semanas denunciando falta de transparencia en la gestión, no solo del fondo SEPI, también de otras importantes partidas como serán los fondos europeos Next Generation EU. Tanto es así que el PP,  a través de su portavoz, Cuca Gamarra, ha presentado en el Congreso de los Diputados una petición para conocer el expediente completo de la concesión de la ayuda a la aerolínea de la familia Hidalgo. 

Cabe recordar que Air Europa está en pleno proceso de compra por parte de Iberia, en una operación que se anunció antes de la irrupción del coronavirus y que hubiera sido en sus términos originales la mayor del sector. En cambio, los mil millones que se iban a pagar inicialmente se vieron reducidos a un pago de 500 en seis años a la familia propietaria y la compañía se cargó con una deuda de otro tanto -475 millones de préstamos SEPI más 140 millones de su pool bancario habitual con garantía del ICO-. En total, una operación más cara tras el Covid que antes de él. 

Más allá de la opacidad de la concesión de las ayudas del fondo SEPI que lleva semanas sobre la mesa, en el sector ya empiezan a surgir voces que apuntan a posibles quitas de deuda en esta operación que "peinen adecuadamente" unos números que para muchos no salen de otra forma. La negociación entre la banca y el Ministerio para condonar una parte de los ICO podría estar en el foco de este movimiento según las mismas fuentes. La lupa está sobre la operación.

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