La contribución al beneficio se dispara un 73%

Banco Sabadell saca brillo al británico TSB tras su giro comercial en hipotecas

La filial se ha enfocado en su negocio tradicional, además de llevar a cabo un proceso de reducción de costes, que incluía la reestructuración de plantilla y oficinas, y se ha dado un fuerte impulso de la plataforma tecnológica.

González Bueno, Banco Sabadell
Banco Sabadell saca brillo al británico TSB tras su giro comercial en hipotecas
CONTACTO vía Europa Press

La filial británica de Banco Sabadell, TSB, fue durante años un quebradero de cabeza para la entidad española. Tantas fueron las dudas que despertó que el mercado llegó a especular con la posibilidad de que el banco que dirige César González-Bueno terminara colocándole el cartel de 'se vende'. Sin embargo, una vez resueltos los problemas de la integración tecnológica, junto con un giro comercial más enfocado en su negocio de hipotecas y la contención de costes, Banco Sabadell comienza a sacar brillo a TSB.

A cierre de los nueve primeros meses del año, TSB obtuvo un beneficio neto de 152 millones de euros, lo que supone una mejora del 48,1% con respecto al mismo periodo de 2022. Precisamente los analistas de Bankinter destacan la buena evolución de la franquicia de Reino Unido con un margen de explotación y una rentabilidad al alza, "pese a la presión competitiva que vive el mercado hipotecario en Reino Unido".

El margen de intereses se situó en los 784 millones de euros, tras experimentar una subida del 9,3% gracias a un entorno de tipos altos, después de que Banco de Inglaterra haya colocado el precio en el 5,25%. Esto supone un apoyo para los ingresos y, además, permite compensar los menores márgenes de las hipotecas y unos volúmenes más reducidos.

Desde el banco señalan varias claves que explican esta mejora. Para empezar, TSB se ha concentrado en lo que mejor saben hacer, que es vender hipotecas. Paradójicamente, a eso ha ayudado tener una de las plataformas tecnológicas más modernas del sector en el país, lo que se ha traducido en que el número de solicitudes de hipotecas haya aumentado en un 9% en el trimestre hasta 1.777 millones, frente a los 1.632 millones del segundo trimestre. Aunque el banco reconoce que el nivel actual de nueva producción de hipotecas no es suficiente para producir un crecimiento de volúmenes positivo.

Asimismo, se ha hecho un esfuerzo muy importante en contención de costes, entre lo que se incluyó un proceso de restructuración de oficinas y plantilla. El mensaje de estabilidad del perímetro del grupo también refuerza el foco de los equipos, tal y como reconoció el propio consejero delegado del banco durante al rueda de prensa posterior a la presentación de resultados.

Pero lo que es más importante, la contribución de TSB al beneficio de Banco Sabadell se situó en 161 millones de euros, lo que supone disparar esta métrica casi un 73% (un 72,9%) y ha permitido a la entidad superar los 1.000 millones de euros de beneficio. En concreto, las ganancias de Banco Sabadell hasta septiembre alcanzaron los 1.028 millones de euros. Si solo se tiene en cuenta el trimestre, la contribución positiva ha sido de 55 millones de euros, lo que supone una mejora del 6,2% si se compara con las cifras del año pasado. Hace justo doce meses, la aportación de la filial británica al beneficio de Banco Sabadell para los nueve primeros meses del año fue de 93 millones de euros, mientras que en 2021 la contribución fue de 82 millones de euros, en cambio, en 2020 fue negativa por un importe de 155 millones.

Un largo periplo

El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, anunció en marzo de 2015 la compra del TSB por parte del Sabadell por 2.350 millones de euros o 1.700 millones de libras. La adquisición otorgará 340 peniques (4.8 euros) por acción a los accionistas del banco británico, la sexta entidad financiera de Reino Unido. El objetivo de esa operación era potenciar el crecimiento del banco español junto a su expansión internacional. Sin embargo, la operación estuvo marcada por más de un traspié.

El más conocido se produjo durante la integración tecnológica, que se llevó a cabo en abril de 2018. Este proceso provocó una caída e interrupción de los servicios, afectando a miles de clientes, quienes veían como sus cuentas se quedaban bloqueadas y no podían acceder a los servicios ni por las sucursales, teléfono, ni la banca online. Este desajuste provocó pérdidas de 384 millones en Sabadell en el ejercicio entre gastos extraordinarios e indemnizaciones a clientes. A ello se unía una multa impuesta por 56 millones de euros.  Clave también fue la llegada de César González-Bueno que dio un giro a la estrategia del banco, centrándose en su negocio hipotecario.

Mostrar comentarios